A nivel mundial, el líder indiscutible de potencia instalada de la energía eólica es China, cuya capacidad ha superado recientemente los 168.7 gigavatios (GW). El país asiático ha triplicado sus instalaciones eólicas en la última década, consolidando su liderazgo con una clara ventaja sobre los Estados Unidos, que ocupa el segundo lugar con 82.1 GW al cierre de 2017. Aunque EE.UU. también ha hecho grandes esfuerzos para aumentar su capacidad, factores políticos, como la administración de Trump, ralentizaron su crecimiento eólico.
En 2024, China ha reforzado su posición con una capacidad eólica instalada de más de 300 GW, triplicando casi la capacidad actual de Estados Unidos. Este crecimiento ha venido acompañado de un impulso tecnológico significativo, especialmente en la energía eólica marina y el desarrollo de turbinas cada vez más potentes y eficientes.
El sector de la energía eólica es una de las fuerzas más poderosas detrás de la transición energética mundial, siendo un motor de crecimiento económico y sostenibilidad. Aunque Estados Unidos ha incrementado su capacidad eólica en estados como Texas y Iowa, la diferencia con China sigue siendo significativa. Se espera que para 2030, China triplique nuevamente su capacidad con nuevas subvenciones gubernamentales y avances tecnológicos, mientras que EE.UU. prevé duplicar su capacidad en la próxima década.
Exposición Windaba y las perspectivas globales
Durante la exposición anual Windaba celebrada en 2017 en Sudáfrica, Steve Sawyer, ex secretario general del Consejo Global de Energía Eólica (GWEC), destacó que, a nivel global, se esperaba que las instalaciones alcanzaran entre 530 y 540 GW al finalizar ese año. Desde entonces, se ha registrado un fuerte repunte, y en 2024 el total ha superado los 850 GW gracias a la aceleración liderada principalmente por China y Europa.
Además de China y Estados Unidos, otros países como México y Brasil han surgido como mercados clave. En el caso de México, las costas del Golfo y del Pacífico proporcionan condiciones excepcionales para el desarrollo de energía eólica. Brazil, por su parte, ha mostrado un crecimiento continuo con grandes proyectos en sus regiones costeras. También destaca Sudáfrica, que ha comenzado a consolidar su mercado eólico con la instalación de varios parques eólicos.
En relación con India, este país ha superado a España y ahora está entre los cinco principales productores de energía eólica del mundo. Alemania y Países Bajos han intensificado también sus inversiones en energía eólica marina (offshore), consolidando a Europa como una potencia emergente en este ámbito.
En Europa, Dinamarca sigue siendo el líder en términos de cuota eólica, con más del 40% de su electricidad generada por energía eólica. Este es un ejemplo a seguir para otras naciones europeas donde se está incentivando el uso del viento como fuente de energía renovable.
El impulso en Sudamérica
Sudamérica también ha experimentado un auge en la energía eólica. Argentina se destaca especialmente gracias a la Patagonia, una región con excelentes condiciones para el desarrollo de parques eólicos. Se espera que la capacidad instalada llegue a los 800 GW para 2021. México, por su parte, ha seguido ampliando sus infraestructuras eólicas posicionándose como uno de los líderes del continente.
En 2018, durante la Expo y Congreso Mexico WindPower, Steve Sawyer enfatizó la importancia de América Latina para el futuro del sector. Hoy en día, 29 mercados ya tienen más de 1 GW de capacidad instalada, y nueve países superan los 10 GW, incluyendo a Brasil, que ha incrementado su capacidad de generación en los últimos años.
El desarrollo de tecnologías offshore ha sido crucial en este crecimiento, permitiendo la instalación de parques eólicos en ambientes marinos de alta productividad. China, en particular, ha apostado por grandes proyectos offshore, que representan un porcentaje considerable de su capacidad total.
Los mayores parques eólicos del mundo
El 70% de los parques eólicos más grandes del mundo están en los Estados Unidos, destacando sobre todo el estado de Texas. Sin embargo, China ya está construyendo algunos de los parques más grandes del planeta. A continuación, se presentan los tres parques eólicos más grandes del mundo:
- Centro de Energía Eólica Alta (California, EE.UU.): Con una capacidad operativa de 1.020 MW, este es el parque eólico más grande del mundo, gestionado por Terra-Gen Power en Tehachapi, California.
- Parque Eólico Shepherds Flat (Oregón, EE.UU.): Con una capacidad de 845 MW, este parque incluye 338 turbinas GE2.5XL, una de las turbinas más eficientes en el mercado.
- Parque Eólico Roscoe (Texas, EE.UU.): Este parque cuenta con una capacidad de 781,5 MW y fue desarrollado por E.ON Climate & Renewables entre 2007 y 2009.
Innovaciones recientes en la energía eólica
China ha seguido liderando tanto en energía eólica terrestre como en el aprovechamiento de vientos marinos, donde ha batido récords. En 2024, China implementó la turbina más grande del mundo, la Goldwind GWH252-16MW, que generó 384,1 MWh en un solo día, energía equivalente para abastecer a 170,000 hogares.
Esta impresionante hazaña fue impulsada por la ubicación estratégica en las costas de Fujian y el desarrollo de tecnologías que permiten a los aerogeneradores soportar condiciones meteorológicas adversas, como tifones. Estas innovaciones han permitido a China aumentar exponencialmente su capacidad offshore.
El progreso de China en este aspecto es clave para alcanzar sus ambiciosos objetivos de neutralidad de carbono para 2060. Actualmente, más del 60% de la capacidad eólica marina mundial está en China, poniendo al país a la vanguardia en energía renovable.
A medida que la tecnología sigue avanzando y se reducen los costes de instalación y mantenimiento, China y Estados Unidos probablemente seguirán liderando el mercado mundial de energía eólica, consolidando su dominio a largo plazo.
La energía eólica ha demostrado ser un pilar crucial en la carrera hacia la sostenibilidad. La continua expansión e innovación, especialmente en los sectores offshore y tecnológico, aseguran que países como China y Estados Unidos mantendrán su liderazgo global en esta importante transición energética.