Inversiones y retos de España para cumplir con la transición a vehículos eléctricos

  • España necesita entre 1,5 y 6 millones de vehículos eléctricos para 2030.
  • El país debe invertir al menos 15.000 millones de euros hasta 2030 para infraestructura.
  • Se proyecta que España necesita 100.000 puntos de recarga operativos para 2030.

cuántos paneles solares necesito para cargar un coche eléctrico

El cambio climático está provocando un aumento en las temperaturas globales y afectando gravemente el equilibrio de los ecosistemas. Como resultado, los recursos de los que disponemos actualmente, tanto naturales como económicos, podrían no estar a nuestro alcance en el futuro. Para evitar que las temperaturas globales asciendan más de 2 grados, como ha advertido la comunidad científica, es urgente reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. En este contexto, uno de los sectores más críticos es el transporte.

Una de las estrategias más destacadas para reducir estas emisiones es el uso de vehículos eléctricos. Si analizamos las principales fuentes de emisiones de carbono en España, el transporte se posiciona como uno de los mayores generadores de estos gases. Surge la cuestión: ¿cuántos vehículos eléctricos serán necesarios para que España cumpla los objetivos de descarbonización exigidos por la Unión Europea para 2050?

Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero

La Unión Europea ha establecido objetivos de descarbonización ambiciosos para el año 2050, con el fin de mitigar los efectos del cambio climático. En este marco, España está obligada a reducir significativamente sus emisiones de CO2, y uno de los sectores que más contribuyen a estas emisiones es el transporte.

El transporte es responsable del 24% de las emisiones de gases de efecto invernadero en España, lo que equivale a alrededor de 80 millones de toneladas. De estas emisiones, el 66% corresponde al transporte de pasajeros por carretera, mientras que el 28% proviene de mercancías. Para cumplir con los objetivos de la UE, España necesitará reducir sus emisiones en un 80% a 90% con respecto a los niveles de 1990.

No obstante, el futuro de la movilidad eléctrica en el país sigue siendo incierto. En 2020, se proyectaba que España necesitaría contar con 300.000 coches eléctricos en circulación y 11.000 puntos de recarga para cumplir los objetivos intermedios. Sin embargo, a pesar del crecimiento progresivo, en 2023 la cifra proyectada se quedó corta, alcanzando apenas unos 220.000 vehículos eléctricos, aunque la infraestructura ha mejorado considerablemente con más de 30.000 puntos de recarga, aunque por debajo de lo necesario. El desafío de acelerar la descarbonización es inminente.

tarifas nocturnas coche eléctrico

Inversiones y mercado de coches eléctricos

El mercado de coches eléctricos en España sigue teniendo una representación modesta. En comparación, mientras que Noruega tiene una cuota de mercado del 23% en vehículos eléctricos, España tiene solo un 4,5%. Esto coloca al país en una situación de desventaja en términos de adaptación a la demanda y los objetivos de la UE.

Para cumplir con la descarbonización exigida, España necesita acelerar no solo la cantidad de coches eléctricos en circulación, sino también la infraestructura de recarga, que es fundamental para su adopción masiva. Según la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA), España tendría que invertir entre 6.000 y 11.000 millones de euros entre 2023 y 2030 para cumplir sus metas.

En términos de flota, los planes actuales proponen que España debería tener entre 1,5 y 2 millones de vehículos eléctricos para 2025, y aumentar hasta 6 millones en 2030. Estas cifras son clave para que España pueda cumplir con el objetivo del 30% de vehículos en circulación siendo eléctricos para esa fecha.

No obstante, el bajo crecimiento en ventas de vehículos eléctricos en 2023 y la escasa penetración de estos vehículos provocan dudas sobre si estos objetivos son realistas. Para acelerar el proceso, se plantean varios retos, entre ellos mejorar la infraestructura y ofrecer incentivos fiscales que faciliten la compra de vehículos eléctricos de forma más inmediata.

La Infraestructura de recarga: clave para el éxito

El desarrollo de una red de recarga sólida es clave para el éxito del coche eléctrico en cualquier país. En España, la infraestructura no ha crecido al mismo ritmo que la demanda, lo que supone un obstáculo importante para la implementación masiva de vehículos eléctricos.

Según datos de ACEA, Europa debería contar con al menos 6.800.000 puntos de recarga públicos para 2030. Para alcanzar esto, el ritmo de instalación de puntos de recarga en Europa debe multiplicarse por siete, pasando de los 2.000 actuales a 14.000 puntos semanales.

En el caso de España, la situación no es muy diferente; el país ha incrementado su número de puntos de recarga a un ritmo moderado. A finales de 2023, España contaba con aproximadamente 29.301 puntos de recarga, una cifra todavía muy lejos del objetivo de 45.000 puntos que debería haberse alcanzado ese mismo año.

La inversión necesaria para llegar a estas cifras es considerable. Expertos como Félix García, de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), estiman que España deberá invertir alrededor de 1.465 millones de euros para alcanzar los 64.000 puntos de recarga en 2024, un objetivo factible solo si se eliminan las trabas administrativas y se logran optimizar los tiempos de instalación, que actualmente pueden tardar hasta dos años en funcionar debido a barreras burocráticas.

ventas de coches eléctricos en septiembre 2023 en España

El contexto europeo y los desafíos globales

A nivel global, se observan ciertas tendencias que pueden afectar al éxito de España en su transición hacia una movilidad descarbonizada. Si bien Europa lideró inicialmente la adopción de vehículos eléctricos, Estados Unidos y China han adquirido un papel dominante en la producción e inversión en el sector. En 2023, Norteamérica concentró el 37% de las inversiones globales en el sector eléctrico, dejando a Europa con un 26%, muy por detrás.

En comparación, España solo recibió alrededor de 10.000 millones de euros en inversiones en vehículos eléctricos y baterías desde 2021, lo que la sitúa en una posición de desventaja si quiere competir a nivel global.

En consecuencia, instituciones como Transport and Environment (T&E) han instado a que la UE adopte una política industrial más agresiva para atraer inversiones y acelerar la descarbonización del transporte. Además, el éxito de España dependerá de la colaboración público-privada para incentivar tanto la producción como el consumo de coches eléctricos. Con proyectos como la planta de baterías en Sagunto de Volkswagen, España está en posición de convertirse en un hub importante para la fabricación de vehículos eléctricos en Europa.

El futuro del transporte en España dependerá en gran medida de la capacidad del país para coordinar las inversiones necesarias, actualizar su red de infraestructuras y atraer la producción de vehículos eléctricos y baterías. Aunque los objetivos a cumplir para 2030 y 2050 son ambiciosos, también son alcanzables si se toman las medidas adecuadas para acelerar las inversiones y aumentar la adopción de vehículos eléctricos.


Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*

  1. Responsable de los datos: Miguel Ángel Gatón
  2. Finalidad de los datos: Controlar el SPAM, gestión de comentarios.
  3. Legitimación: Tu consentimiento
  4. Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  5. Almacenamiento de los datos: Base de datos alojada en Occentus Networks (UE)
  6. Derechos: En cualquier momento puedes limitar, recuperar y borrar tu información.

      Josep dijo

    Sin prisas, dejad que se vayan comprando coches eléctricos y que rueden, ya los compraremos cuando esté más claro el papel que van a representar, !º que vayan haciendo el rodaje, 2º Cuando ya esten aplicadas las 1ªs soluciones, ya los compraremos.