En nuestros ecosistemas, todos los seres vivos siguen un proceso llamado selección natural. Este proceso es el que decide qué genes son más beneficiosos para la supervivencia de los seres vivos y provocan “mejoras” en la adaptación.
El cambio climático y sus devastadores efectos sobre todo el mundo, también puede afectar a este proceso de selección natural, haciendo que se modifiquen las distintas trayectorias evolutivas de los organismos.
¿Qué es la selección natural?
Para entender bien como el cambio climático afecta a la selección natural, tenemos que saber bien de que se trata. La selección natural es el proceso por el cual una especie se adapta a su medio ambiente. Se lleva al cambio evolucionario cuando individuos con ciertas características poseen una tasa de supervivencia o reproducción más alta que los otros individuos de la población y pasan estas características genéticas heredables a su progenie.
Un genotipo es un grupo de organismos que comparten un conjunto genético específico. Por lo tanto, para explicarlo de forma simple, la selección natural es la diferencia consistente en la supervivencia y la reproducción entre genotipos diferentes. Esto es lo que podríamos llamar éxito reproductivo.
Selección natural y cambio climático
Un estudio publicado en la revista Science publicado la semana pasada sostiene que los cambios a nivel mundial en este proceso de selección natural están más guiados por las precipitaciones que por las temperaturas. Debido a que el cambio climático modifica el régimen de precipitaciones a nivel global, puede afectar también a este proceso de selección natural.
Aunque las consecuencias ecológicas del cambio climático están cada vez mejor documentadas, los efectos del clima en el proceso evolutivo que guía la adaptación son desconocidos”, dice el texto publicado en Science.
Debido a que este es un trabajo bastante complejo, los científicos han tenido que acudir y emplear una gran base de datos que se encuentra tras los estudios realizados a lo largo de las últimas décadas. En dicha base de datos se encuentran los estudios realizados sobre las distintas poblaciones de animales, plantas y otros organismos, así como de su habilidad para sobrevivir y reproducirse.
Disminución de las precipitaciones y aumento de las sequías
Una de las variables que más pueden afectar a la selección natural es el régimen de precipitaciones. Si disminuyen, aumentan las sequías, tanto en tiempo como en frecuencia. Entonces, el aumento de las sequías provoca que muchas zonas se vuelvan más secas e incluso desérticas. Sin embargo, en otras zonas, las precipitaciones están aumentando y se pueden dar casos en los que la región se convierta en una zona más húmeda.
Sea cual sea el caso, esto afecta a los patrones de la selección natural. Es decir, la evolución de las distintas especies de organismos se ve afectada debido a que no sólo cambian los genes de las especies, sino que también lo hace el agente externo (el clima). Las variaciones en el clima, como lo son el aumento de temperaturas, los regímenes de viento, las lluvias, etc. Afectan a las modificaciones que pueden experimentar los distintos organismos a raíz del proceso de selección natural.
Cambios en los ecosistemas
En los ecosistemas pueden haber cambios a largo plazo en los que las distintas especies puedan tener un “margen” para poder adaptarse y aprender a sobrevivir ante los nuevos escenarios. Por ejemplo, un cambio en el patrón de lluvias puede afectar la fuente de alimento de diversos organismos. Esto es, especies que dependen de ciertos alimentos como lo son los herbívoros, pueden verse afectados en una reducción de la cobertura vegetal a causa de la disminución de las precipitaciones.
Es por eso, que conocer los efectos del cambio climático y saber qué relación guarda con los procesos evolutivos de la selección natural es de vital importancia para conocer el cambio en el funcionamiento de los ecosistemas. Debido a que a corto plazo se espera un aumento de fuertes precipitaciones que podrían dar lugar a cambios considerables en los patrones de selección.
Como he comentado antes, dependiendo de la rapidez con la que se produzcan los cambios en los ecosistemas, las especies se podrán adaptar o no ante las nuevas situaciones. Sin embargo, no lo que no se puede negar, es que el cambio climático tiene el potencial suficiente para alterar la adaptación de los seres vivos en todo el mundo.
hay una gacela metiendose en el recto de otra, justamente en la primera foto