Existen numerosas plagas que atacan a los cultivos y provocan graves destrozos. Todo ello conlleva grandes gastos económicos y alteraciones en los ecosistemas naturales.
En los últimos años, la bacteria Xylella fastidiosa se ha convertido en una plaga vegetal muy peligrosa en Europa. Sus numerosos daños han obligado a talar centenares de miles de olivos en el sur de Italia. Ahora se está extendiendo con bastante fuerza por las islas Baleares.
Xylella fastidiosa, una plaga voraz
Los primeros casos de infección de Xylella se dieron en el pasado mes de noviembre en plantas ornamentales de Mallorca. Los expertos de la materia se confiaron pensando que serían casos aislados y que no afectarían ni se extenderían al resto de las plantas y sobre todo los cultivos. Sin embargo, se han detectado ya 92 casos positivos de Xylella en Mallorca y Eivissa. Para poder detener esta plaga se ha aprobado una resolución que se declarará todo el territorio balear como zona demarcada por esta plaga.
Esta medida tomada por el Gobierno hará que no se puede comerciar con ningún tipo de vegetal vivo, exportándolas a otros lugares. De esta forma se evita cualquier tipo de contagio y se trata la plaga in situ para que no cause más daños. Además evitará que se talen miles de árboles y una gran extensión de vegetación para hacer frente a la tala.
En la Unión Europea, consideran a la Xylella fastidiosa junto con el nematodo Bursaphelenchus xylophilus son las dos plagas de nueva aparición más peligrosas que amenazan a la vegetación. Para evitar sus daños, desde hace unos cuatro años, se vienen aplicando medidas muy exigentes y radicales para poder controlar su expansión. La Xylella fastidiosa va provocando la muerte lenta de la planta a la que infecta.
Zonas infectadas por Xylella fastidiosa
Aunque la plaga se ha extendido por Italia y es conocida como “la peste del olivo”, la única zona de España en la que se ha localizado esta bacteria es en las Baleares. Las primeras medidas preventivas aplicadas en Mallorca no han sido suficientes. Por lo que se trazó un radio de 100 metros para poder delimitar las zonas infectadas. En dichas zonas se ha procedido a eliminar todas las plantas huéspedes de la especie. También se ha procedido a delimitar una zona de 10 kilómetros para una zona de contención en el que se ha aplicado una malla sistemática de 100×100 m. En dichas mallas se han tomado muestras de las plantas que presentaban síntomas de Xylella y las que las rodean, y se han prospectado todas las variedades huéspedes de todas las subespecies de Xylella. Con estas actuaciones se han eliminado 1.921 plantas de acuerdo con el principio de precaución fitosanitaria.
De estas prospecciones ha habido 71 positivos confirmados en Mallorca y 21 en Eivissa. Estos resultados hacen considerar que se puede hablar de la dispersión de la bacteria por todo el territorio. Es por eso, que en la Orden ministerial del sábado 21 de enero de 2017, viene descrito el imperativo de impedir la salida del territorio de la comunidad autónoma de todos los vegetales para la plantación, excepto de las semillas, que no son susceptibles de contaminación.
El Gobierno afirma que esta Orden ministerial no genera gastos económicos ni mucho menos pérdidas. Ya que, aparte que las Baleares son importadores de material vegetal vivo y no exportadores, esta Orden ministerial hará minimizar las consecuencias negativas de la infección por Xylella fastidiosa.
Especies infectadas
Entre los árboles afectados por Xylella fastidiosa nos encontramos con olivos, cerezos, ciruelos y almendros. Con respecto a Mallorca, se han detectado positivos en siete olivos, catorce acebuches, nueve polígalas, tres cerezos, un ciruelo y treinta y siete almendros, mientras que los positivos de Eivissa han sido en dos adelfas, dieciséis olivos, una polígala, una mimosa azul y una lavanda.
Por último, se instalaron trampas cromóticas en las zonas infectadas de Mallorca. Se trata que trampas que permiten detectar la presencia del vector que transmite la bacteria. En el Departamento de Zoología de la Universidad de Baleares se ha comenzado a realizar un estudio para ver los vectores potenciales de esta bacteria y así enfocarse en detenerlos.
Es verdaderamente fastidiosa.