El Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz vuelve a activar su programa de apoyo a las comunidades energéticas con una dotación que asciende a 700.000 euros, lo que supone un incremento cercano al 14% respecto al año anterior. La convocatoria está orientada a consolidar proyectos de autoconsumo colectivo y nuevas inversiones que permitan dar continuidad al impulso municipal.
La edición previa facilitó la constitución de diez comunidades que suman 1.895 placas solares y agrupan a 453 socios. Estas instalaciones, repartidas por barrios como Goikolarra, Zaramaga, Salburua, Zabalgana, Ariznabarra y Lakua-Arriaga (además de dos en Txagorritxu) y en los concejos de Gamarra Mayor y Mendoza, suponen en torno a 969 kW instalados y una producción anual estimada de aprox. 962.000 kWh, un ejemplo de cómo las comunidades energéticas locales están creciendo en el territorio.
Cómo son las nuevas ayudas y quién puede solicitarlas
El plazo para presentar solicitudes permanecerá abierto hasta el 30 de marzo de 2026, con unas bases que pueden consultarse en el Boletín Oficial del Territorio Histórico de Álava (BOTHA). La línea de subvenciones nace del acuerdo presupuestario entre PSE-PNV y EH Bildu, que han remarcado la buena acogida del programa y su continuidad.
Las ayudas están diseñadas para cubrir gastos de constitución y gestión de comunidades energéticas, así como inversiones en instalaciones de energía solar fotovoltaica y nuevas soluciones renovables. En función del proyecto, la financiación podrá alcanzar entre el 70% y el 80% del coste subvencionable; estas medidas guardan relación con la constitución y gestión de comunidades energéticas y sus modelos organizativos.
En paralelo, la adquisición de vehículos para movilidad compartida por parte de las comunidades recibirá apoyo específico: se subvencionará el 50% de la inversión con un límite de 20.000 euros por vehículo. Esta opción está orientada a flotas de uso comunitario y complemento de los proyectos de energía, en línea con estrategias integrales de resiliencia energética que incluyen movilidad.
Para determinados conceptos (como trámites, notariado, estudios de viabilidad o desarrollo web), el importe a percibir puede llegar hasta 79.500 euros por comunidad energética, siempre que la sede y las instalaciones se ubiquen en el término municipal de Vitoria-Gasteiz.
Los responsables municipales han subrayado que el programa busca consolidar un modelo local de energía más cercano y participativo, en el que las comunidades sean el motor del cambio. En palabras del equipo de gobierno, la prioridad es facilitar la puesta en marcha y la gestión de estas iniciativas para que sigan multiplicándose por los barrios, en sintonía con planes de acción y compromisos locales.
Tecnologías y movilidad que entran en la convocatoria
Como novedad, la convocatoria abre la puerta a nuevas tecnologías renovables más allá de la fotovoltaica: aerotermia, geotermia, hidrotermia, mini-eólica, mini-hidráulica y bioenergía renovable. Se trata de soluciones que pueden complementar a las placas solares y dar mayor estabilidad a la generación local, complementando la energía fotovoltaica.
La movilidad también forma parte del enfoque de la convocatoria. Podrá financiarse la compra de vehículos con etiqueta Cero Emisiones (incluidos eléctricos puros, determinados híbridos enchufables o pila de combustible), además de bicicletas y patinetes eléctricos destinados a servicios compartidos. Se exige que el uso sea comunitario y que las comunidades cuenten con al menos 15 integrantes.
El Ayuntamiento mantiene una atención especial hacia los barrios más antiguos y vulnerables, donde la necesidad de mejora del aislamiento y de la eficiencia energética es más acuciante. En estos casos, la subvención puede alcanzar el 80%, mientras que en el resto de distritos y áreas rurales la cobertura se sitúa en torno al 70%.
En el Casco Viejo, la protección patrimonial impide instalar placas en cubierta, por lo que el consistorio estudia alternativas compatibles con el entorno. Entre las opciones que se analizan figuran soluciones integradas en cubierta que respeten las exigencias urbanísticas, una vía que ya se está explorando en otras ciudades con centros históricos protegidos.
Los portavoces de las distintas formaciones que respaldan el programa han remarcado que las comunidades energéticas se han convertido en una herramienta clave para democratizar la energía, aprovechando espacios disponibles en la ciudad y facilitando que la ciudadanía participe en la generación renovable y en nuevos usos como la movilidad compartida. Este enfoque está vinculado a análisis sobre comunidades energéticas en España y su impacto ciudadano.
Con la ampliación presupuestaria, la inclusión de tecnologías complementarias y el refuerzo a la movilidad de cero emisiones, Vitoria-Gasteiz aspira a multiplicar el número de comunidades y consolidar los resultados del último ejercicio, extendiendo los beneficios ambientales y económicos a más barrios y colectivos.
