¿Qué son y para qué sirven las granjas escuela?

Es de vital importancia de cara al futuro poder enseñar a los más pequeños a que tengan valores sobre el medioambiente. Poder instruirlos para que tengan hábitos sostenibles y creen concienciación por el respeto al medioambiente y su conservación.

A veces, en las numerosas actividades de la educación ambiental, acaban por sorprenderse más los adultos que los niños. Dado que existen un montón de datos, curiosidades y demás aspectos que creían conocer, pero que cuando se les enseña, son todo lo contrario. ¿Qué importancia puede tener que los niños disfruten de la naturaleza?

Actividades de educación ambiental

Un ejemplo de actividad para que los niños conozcan más su medio y la procedencia de muchos de los productos que consumen es la de visitar granjas. Cuando los niños se enteran que para poder obtener 22 litros de leche cuando se ordeña a una vaca se tarda unos 10 minutos, incluso los adultos se sorprenden más que los niños.

Las granjas escuela son un tipo de educación ambiental que favorece a la enseñanza del niño y a la adquisición de conciencia por el cuidado del medioambiente. Los niños criados en ciudad desconocen muchos más aspectos de los que creemos. En general, incluso los adultos que se desarrollan en ambientes urbanos, desconocen muchos aspectos de la naturaleza que les puede servir para poder conservarla. En este caso, nos referimos a la educación de “necesidad de conocer para poder conservar”. Cuando una persona es consciente de la importancia sobre un determinado recurso natural, espacio, animal, etc. Nace una necesidad intrínseca de conservarlo, cuidarlo, preservarlo…para poder seguir manteniendo el servicio que nos ofrece.

La transmisión de conocimientos sobre el medioambiente no se soluciona con visitar el campo o hacer vida rural durante los fines de semana. Para poder introducir valores y conocimientos en los niños, es necesario que ellos vivan sus propias experiencias y se relacionen con su entorno personalmente. Nosotros podemos enseñarles las nociones básicas sobre frutas, verduras, animales, granjas, etc. Pero nada como que el niño lo viva en sus carnes.

Las granjas escuela

Las granjas escuela surgieron en España hace cerca de tres décadas como respuesta a una sociedad que se concentraba en las ciudades y quería reencontrarse con la naturaleza. Las personas que se han desarrollado en ambientes urbanos son capaces de poder moverse fluidamente por la ciudad. Sin embargo, han perdido su conexión con la naturaleza y el modo de vida rural. No es demasiado extraño que los niños criados en ciudades pregunten de dónde vienen los huevos o si los caballos dan leche. Recuperar la cultura rural y de la naturaleza para nuestros hijos es importante para que tengan una visión real del mundo en que viven.

Todas las actividades que un niño puede realizar en una granja escuela difieren a las que hacen en la ciudad. Alejarse de las tecnologías, las pantallas, los móviles y videojuegos, es también saludable para ellos. Además de conocer aspectos de la naturaleza y poder divertirse, hacen deporte al aire libre y favorece a su sistema inmunitario.

En estas granjas se sacan a los animales para que los niños puedan tocarlos: burro, vaca, caballo, conejo o cabra. La mayoría de ellos descubre por primera vez el tacto del pelaje de estos animales o su voz. Aprenden de primera mano cómo suena un rebuzno o un mugido, y deja de ser sólo una palabra que se aprende en el cole. Recogen huevos, ven cómo se ordeña una vaca, montan a caballo, riegan el huerto, plantan semillas o labran la tierra.

De esta forma el contacto con la naturaleza y esta experiencia personal es muy productivo para su modo de vida y su concienciación ambiental. El aprendizaje a través de la experiencia es uno de los objetivos de estos centros rurales, como fomentar el contacto con la naturaleza, el mundo animal y rural o que los niños adquieran conocimientos sobre procesos de transformación naturales, de dónde viene la leche y el queso que compramos en el supermercado; cómo se hace un telar de lana o cómo y con qué ingredientes naturales se hace un bizcocho, etc.

Requisitos de las granjas escuela dentro de la legalidad

-Unas instalaciones que garanticen la seguridad de los niños que las visitan.

-Mantener la salud y el bienestar de los animales que alberga.

-Tener licencia para desarrollar su actividad.

-Contar con monitores formados de manera específica para las actividades medioambientales de formación con niños.

Como podéis ver, la granja escuela es una herramienta de educación ambiental muy buena para los más jóvenes y los no tan jóvenes.