A la hora de emprender un proyecto de renovación, rehabilitación o nueva construcción, es fundamental tener en cuenta el aspecto de la calefacción para conseguir importantes ahorros energéticos y económicos. Es importante tener en cuenta que los requisitos de calefacción de una vivienda unifamiliar difieren mucho de los de un apartamento, ya que las características y el espacio de calefacción son distintos. Además, la zona climática en la que se sitúa la vivienda juega un papel fundamental a la hora de determinar las necesidades de calefacción. Teniendo en cuenta todos estos factores, podemos identificar qué sistemas de calefacción son más eficientes.
En este artículo vamos a contarte qué sistemas de calefacción son más eficientes para que puedas elegir el que más se adapte a tu vivienda.
Qué sistemas de calefacción son más eficientes
Para seleccionar el sistema de calefacción más eficaz es fundamental conocer las distintas opciones disponibles en el mercado. Biomasa, calefacción por suelo radiante, calderas de condensación y bombas de calor son sólo algunas de las muchas posibilidades. Es muy recomendable comprender los pros y los contras de cada sistema. Buscar la orientación de un instalador profesional siempre es una buena elección. Además, la ubicación de la residencia juega un papel crucial a la hora de determinar el combustible más adecuado, especialmente si hay acceso a una red de suministro de gas licuado.
Hemos compilado una lista de los sistemas de calefacción primarios para ayudarlo a determinar la opción más eficiente para sus necesidades específicas.
Caldera de condensación
No hay duda de que la caldera de gas ocupa un lugar destacado como uno de los principales sistemas de calefacción utilizados en los hogares españoles. Cuando se trata de calderas de gas, las calderas de condensación reinan como las productoras de calor más eficaces tanto para apartamentos como para residencias unifamiliares. Estos extraordinarios sistemas destacan por proporcionar calefacción y agua caliente de forma rápida y eficiente. No sólo conservan energía, sino que también reducen significativamente el consumo de combustible y la liberación de emisiones de NOx y CO2 en comparación con opciones de calderas alternativas.
La caldera de condensación es la única opción fabricada en Europa debido a su rendimiento excepcional. Sin embargo, cabe mencionar que ya no se destinará a proyectos de nueva construcción, ya que su eficiencia ha sido superada por la bomba de calor. Sin embargo, todavía existe un mercado importante para las calderas de condensación en el ámbito de la rehabilitación de viviendas. En España, un número importante de viviendas están obsoletas e ineficientes, lo que hace que su rehabilitación energética sea crucial en la búsqueda de reducir las emisiones de carbono.
Bomba de calor
Actualmente, se erige como el sistema de calefacción más eficaz y ampliamente adoptado del mercado. Operando con energía eléctrica, funciona como un sistema de generación de calor (y frío). Al extraer el calor latente del aire y aumentarlo a través de su circuito altamente eficiente, ofrece un rendimiento excepcional. Su adaptabilidad le permite integrarse perfectamente con varios sistemas de difusión de calor, incluidos radiadores de baja temperatura, calefacción por suelo radiante y fancoils. Su notable eficiencia la califica como una fuente de energía renovable, ya que puede producir una cantidad sustancial de calor con un mínimo aporte eléctrico.
Estos sistemas están diseñados específicamente para extraer calor de diversas fuentes, incluido el aire (aerotermia), el agua (hidrotermia) o la tierra (geotérmica). Entre estas opciones, los sistemas de aerotermia son los más utilizados. La utilización de estos sistemas conduce a una disminución sustancial de las emisiones y del consumo de energía. Además, se pueden combinar con energía fotovoltaica para compensar completamente el consumo energético del sistema de aire acondicionado. Esto significa que la electricidad generada por los paneles solares se utiliza para alimentar la bomba de calor, lo que da como resultado un consumo neto de energía cero para el aire acondicionado.
Además, cabe destacar que el sistema tiene capacidad para suministrar calefacción, agua caliente sanitaria y refrigeración. Como resultado, un único sistema puede satisfacer eficazmente todos los requisitos de aire acondicionado de un hogar. Sin embargo, puede haber casos en los que sea necesaria energía suplementaria, como una caldera de condensación compacta. Sin duda, la bomba de calor ofrece numerosos beneficios.
Calefacción con biomasa
En España, la biomasa está ganando popularidad como combustible alternativo muy eficiente para calefacción, al igual que la bomba de calor. Se encuentran disponibles a precios competitivos varias opciones de combustible de biomasa, incluidos pellets, leña y huesos de aceituna. El uso de combustibles regulados en la biomasa garantiza que siga siendo una fuente de energía renovable y sostenible.
Las estufas y calderas de biomasa ofrecen una opción versátil e interesante para calentar los hogares. Tienen la capacidad de proporcionar calor directo a la vivienda, ya sea a través de radiadores, suelo radiante o calentando agua para agua caliente sanitaria (ACS). Estas estufas también pueden funcionar como calderas tradicionales, permitiendo calentar múltiples estancias. Es importante destacar que siempre se requiere una salida de humos regulada y legislada al utilizar este equipo.
Sistemas de difusión de calor
Cuando se trata de sistemas de difusión de calor en nuestros hogares, existen varias opciones disponibles. Una opción son los sistemas de difusión de alta temperatura, como los radiadores tradicionales. Por otro lado, existen sistemas de calefacción de baja temperatura, entre los que se incluyen la calefacción por suelo radiante y los radiadores de baja temperatura. Estos sistemas son conocidos por su excelente eficiencia energética. Para determinar el sistema de difusión más adecuado para nuestra vivienda y el sistema de generación de calor elegido, es fundamental consultar con un profesional o un instalador.
¿Qué medidas se pueden tomar para aumentar la eficiencia?
Teniendo en cuenta los siguientes factores, se puede optimizar aún más el consumo de energía de estos sistemas que ya son altamente eficientes:
Sistemas de regulación
Incorporando sistemas de regulación electrónica se pueden asegurar niveles excepcionales de eficiencia. Estos sistemas permiten ajustes automáticos de la temperatura de calefacción mediante la utilización de sondas externas, evitando eficazmente el consumo innecesario de energía.
Calificación energética clasificada como Tipo A
La etiqueta energética sirve como indicador para determinar la eficiencia energética de un sistema de calefacción. Una calificación más alta, que va de A a G, indica un mayor nivel de eficiencia. Por ello, a la hora de elegir entre diferentes sistemas de calefacción, es fundamental considerar cuidadosamente su etiquetado. Dentro de la etiqueta se pueden encontrar detalles valiosos como el consumo anual de energía, los niveles de decibeles de sonido y los niveles de eficiencia (COP y SEER para bombas de calor), entre otra información pertinente.
Aislamiento térmico
La eficiencia energética de una vivienda no viene determinada únicamente por un sistema de calefacción eficaz. También depende en gran medida del aislamiento. Reforzar el aislamiento es crucial para minimizar las pérdidas de energía y garantizar que la temperatura interior se mantenga estable sin un consumo excesivo de energía. Mejorar el aislamiento requiere la utilización de materiales adecuados y abordar los puentes térmicos. Una vez que se han identificado las áreas de pérdida de energía, como ventanas, techos, pisos y paredes, se pueden emplear varios sistemas para rectificar estos problemas y mejorar la eficiencia energética general.
Espero que con esta información puedan conocer más sobre qué sistemas de calefacción son más eficientes y sus características.