Después del éxito de la última subasta, el gobierno ya anuncio hace unas semanas que se celebraría otra subasta del mismo tipo para nuevas instalaciones, esta se celebrará el 26 de julio, según el anunció el ministro de Energía, Álvaro Nadal.
Nadal, durante su comparecencia en la Comisión de Energía del Congreso de los Diputados, ha explicado que esta nueva subasta se convoca después de que en la que se celebró el 17 de mayo, donde se adjudicaron unos 3.000 MW, hubiese una demanda superior a los 9000, es decir, más tres veces la potencia ofertada.
Nueva subasta
El ministro ha recalcado la alegría de su ministerio por la extraordinaria demanda que recibieron en la subasta de mayo, en la que las tres cuartas de los 9.000 MW para nuevos proyectos que se presentaron ofertaron el máximo descuento posible, ese hecho, animó al ministerio a convocar una nueva para de esta forma acelerar los acuerdo europeos para el 2020.
El señor Nadal ha insistido una vez más, que los nuevos proyectos adjudicatarios en la subasta de mayo no van a recibir primas, sólo van a recibir la retribución del mercado, aunque en la letra pequeña de los contratos se aseguran una garantía de precio, de entre 38 y 39 euros, en caso de que se produjera un descenso por debajo de esa cuantía. Cosa que hoy parece más que difícil. El ministerio ha recordado que los actuales precios en el mercado mayorista estan en torno de los 50€ MW/h.
Objetivo 2020
Según el ministro, con la subasta celebrada el pasado mayo, España alcanzaría un 18,9 % de energías renovables en su sistema, que con la nueva, por otros 3.000 MW, llegaría al 19,5 %, con lo que quedaría muy cerca del objetivo de tener un 20 % para 2020, con lo cual será de los países europeos que cumplan mejor su objetivo. Ese resultado es bastante, la pregunta es porque se instala más fotovoltaica en Alemania que en nuestro país.
Desde el ministerio, se ha recalcado que los criterios de la nueva subasta serán los mismos que los de la anterior subasta, el mayor descuento ofertado y, a igualdad en el mismo, el mayor número de horas de funcionamiento, un criterio este último que ha reconocido que en la subasta de mayo favoreció a la eólica frente a la fotovoltaica, que sólo se adjudico un megavatio.
Grupo Forestalia
El gran beneficiado fue el Grupo Forestalia, que logro adjudicarse casi la mitad de los 3.000 megavatios (MW) de potencia que el Ministerio de Energía puso sobre la mesa para dar un nuevo impulso al sector.
Según ha confirmado la empresa aragonesa a los medios, logro 1.200 megavatios (MW), los cuales se desarrollarán principalmente en proyectos en la comunidad de Aragón.
Como se alerto desde la Unión Española Fotovoltaica (UNEF), la energía fotovoltaica fue sido la gran perjudicada del concurso de nueva capacidad, y por eso lo ha denunciado de una forma muy elocuente.
En esta nueva subasta, al mantener las mismas reglas que la anterior, Nadal cree que la tecnología eólica volverá a tener una mayor opción, con lo que será el precio y el mayor tiempo de producción determinarán el resultado.
UNEF elevará su denuncia a la UE
Energía dio a conocer la subasta como tecnológicamente neutra. Sin embargo, desde el sector fotovoltaico se consideró que estaban agraviados. Tanto es así que la Unión Nacional de Empresas Fotolotaicas (UNEF) presentó un recurso en el Tribunal Supremo contra la normativa que en caso de empate les daba menos horas de producción y por tanto desventaja en caso de empate. Aunque la subasta ya se ha producido, este procedimiento ante la justicia sigue su cauce. No obstante, fuentes del sector consideran que tiene muy difícil que prospere.
A pesar de ello, tras finalizar la subasta, que ha terminado sin un solo megavatio se vaya a la fotovoltaica, UNEF ha señalado que presentará una denuncia ante la Dirección General de la Competencia de la Comisión Europea, por entender que la puja incumplía el principio de neutralidad tecnológica. «No permiten demostrar nuestra competitividad».
En esta subasta, la eólica podía hacer un descuento máximo sobre la inversión a realizar del 66,01%, mientras que la fotovoltáica podía descontar un 59,84% sobre la inversión a realizar. El resto de tecnologías podían hacer un descuento de casi el 100%.