Galicia se prepara para dar un giro importante en su política medioambiental con la tramitación avanzada de una nueva Ley del clima. La iniciativa, que está siendo impulsada por la Xunta y supervisada por la conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, busca ubicar a la comunidad autónoma como un referente en la lucha contra el cambio climático y la transición energética.
En la última reunión del Consello Galego de Medio Ambiente e Desenvolvemento Sostible (Cogamads), los responsables presentaron el anteproyecto de la ley, destacando la intención de blindar la sostenibilidad en Galicia. Esta norma, que en breve podría recibir luz verde definitiva, se perfila como una herramienta clave para mantener y reforzar los logros obtenidos en la reducción de emisiones contaminantes y avanzar hacia nuevos retos ambientales.
Un marco legal para avanzar en la lucha climática
La futura ley gallega encaja dentro del marco de la Estrategia Gallega de Cambio Climático y Energía aprobada en 2019. La comunidad ha reducido las emisiones netas de gases de efecto invernadero en un 61,7% desde 1990, superando el objetivo del 55% fijado por la Unión Europea para 2030. Políticas y acciones pioneras han situado a Galicia como una de las regiones más avanzadas en estas materias.
El anteproyecto de la ley se centra en cinco líneas estratégicas principales: gobernanza climática y transparencia, planificación, desarrollo de instrumentos económicos y de fomento, sensibilización ciudadana y la mejora de la meteorología, climatología y la calidad del aire. Además, se destaca la incorporación de tecnología e inteligencia artificial para identificar refugios climáticos en municipios, ejemplificado con un proyecto piloto en Ourense.
El texto legal no solo consolidará los avances existentes, sino que también proporcionará herramientas más eficaces para afrontar futuros desafíos, fomentando la participación ciudadana e institucional y promoviendo una transición energética justa e inclusiva.
La importancia de la transparencia y la participación pública ha sido uno de los aspectos destacados por los responsables autonómicos, quienes han invitado a ecologistas y colectivos sociales a involucrarse en el proceso. No obstante, algunos grupos, como Adega o la Federación Ecoloxista Galega, han expresado su malestar por no sentirse suficientemente representados, generando cierto debate en el proceso participativo.
Protección y gestión sostenible de la Costa de Dexo
Junto a la ley climática, la Xunta ha presentado también el proyecto de decreto para la gestión y preservación de la Costa de Dexo, en Oleiros. El plan tiene como objetivo proteger el entorno natural y conservar hábitats y especies, equilibrando el disfrute responsable de la población y visitantes.
Sus principales metas incluyen la realización de inventarios de cuevas marinas, estudios sobre aves locales y la erradicación de especies invasoras. Además, contempla estrategias para promover la movilidad sostenible y mantener el equilibrio entre conservación y actividad humana.
El proceso empezó en abril de 2023 con una memoria inicial sometida a consulta pública y talleres participativos con colectivos y entidades del territorio. Tras su revisión en el pleno del Cogamads, el texto será enviado al Consello da Xunta para su aprobación definitiva y entrada en vigor.
La gestión integral del litoral y los espacios protegidos fortalece la ambición ambiental de Galicia y complementa otras iniciativas, como los planes directores de los parques naturales o las normativas de conservación de monumentos naturales emblemáticos.
Retos y controversias en la política ambiental gallega
No todo el debate sobre la Ley del clima se ha desarrollado sin sobresaltos. La sesión del Cogamads también estuvo marcada por la ausencia de representantes de algunos colectivos ecologistas, quienes protestan por la falta de atención a sus demandas sobre otros temas ambientales, como la proliferación de parques eólicos sin suficiente discusión pública.
La conselleira Ángeles Vázquez reiteró su compromiso de mantener una actitud abierta al diálogo, invitando a todas las partes a participar en los foros disponibles y resaltando que la ley busca alcanzar el mayor consenso posible. Además, se valoró el carácter participativo en la elaboración del texto, a pesar de las discrepancias existentes.
Asimismo, la tramitación del plan de la Costa de Dexo refleja la apuesta de Galicia por fomentar la conservación medioambiental junto con el desarrollo sostenible y la implicación de la comunidad local en la toma de decisiones.
La Ley del clima de Galicia está en la fase final de su proceso y aspira a convertirse en un referente en la liderazgo en energías limpias de la región. Se espera que, una vez aprobada, impulse la acción pública y privada, refuerce la transparencia y aumente la concienciación ciudadana frente a los desafíos ambientales de la región.
