¿Conoces la eutrofización del agua? Existen muchos problemas ambientales relacionados con la contaminación de las aguas. Definimos contaminación de aguas como la pérdida de las características naturales del agua y su composición a causa de agentes externos, ya sean naturales o artificiales. Existen muchos tipos de contaminantes que son capaces de modificar y degradar las características intrínsecas que presenta el agua.
La contaminación del agua causa que esta pierda su funcionalidad en los ecosistemas y deje de ser potable para el ser humano, además de volverse tóxica para plantas y animales. Entre los tipos de contaminación del agua, hoy vamos a hablar de la eutrofización.
Este proceso natural en los ecosistemas acuáticos es acelerado por la actividad humana a través del exceso de materia orgánica y otros nutrientes vertidos al agua. ¿Qué problemas desencadena este proceso para el hombre y el medio ambiente?
Definición de la calidad del agua
Antes de hablar en detalle sobre la eutrofización, es necesario definir qué se entiende por agua de buena calidad, según la legislación vigente. La calidad del agua se refiere a un conjunto de parámetros físicos, químicos y biológicos que permiten la vida de los organismos en su interior y su uso para el consumo humano.
Para que el agua sea considerada de calidad, debe cumplir con las siguientes características:
- Estar libre de sustancias y microorganismos que sean peligrosos para los consumidores.
- No presentar características desagradables para el consumo, como mal olor, turbidez, sabor o color.
La Directiva 2000/60/CE del Parlamento Europeo establece los estándares para evaluar este Buen Estado ecológico y químico del agua, conocida como la Directiva Marco del Agua. Esta normativa es clave para mantener y mejorar la calidad de las aguas en Europa.
Eutrofización de las aguas
En los últimos 200 años, el hombre ha acentuado los procesos naturales de eutrofización, afectando tanto la calidad del agua como la diversidad de las especies que viven en los ecosistemas acuáticos.
La eutrofización causa un crecimiento masivo de algas, lo que provoca que las capas bajas no reciban luz solar, impidiendo la fotosíntesis. Una vez que las algas mueren y se descomponen, se genera un ambiente putrefacto y reductor, lo que significa que los niveles de oxígeno disminuyen, afectando gravemente a los organismos acuáticos.
Etapas de la eutrofización
La eutrofización sigue varias etapas:
Etapa oligotrófica
En esta fase, el ecosistema acuático presenta niveles saludables de nutrientes que permiten la vida de plantas, animales y organismos. Las aguas son transparentes, y la fotosíntesis es adecuada para las capas más profundas.
Aporte de nutrientes
Un exceso de nutrientes, ya sea puntual o continuo, provoca un crecimiento explosivo de algas y plantas acuáticas, que bloquea la luz solar y altera el equilibrio del ecosistema.
Etapa eutrófica
Cuando las algas y plantas mueren, las bacterias descomponen la materia orgánica, consumiendo oxígeno y produciendo toxinas. Esto afecta a los organismos acuáticos, que deben escapar o mueren por la falta de oxígeno.
Causas de la eutrofización de las aguas
Las principales causas de la eutrofización son:
- Agricultura: El uso excesivo de fertilizantes nitrogenados y fosfatados en los cultivos provoca la escorrentía de nutrientes hacia ríos y lagos cercanos.
- Ganadería: Los excrementos ricos en nutrientes de los animales, si no son gestionados adecuadamente, pueden terminar en los cuerpos de agua.
- Residuos urbanos: Los detergentes con fosfatos y otros residuos contribuyen significativamente a la eutrofización.
- Contaminación industrial: Las fábricas arrojan productos químicos (nitrógeno y fósforo) que contaminan las aguas.
- Contaminación atmosférica: Las emisiones de óxidos de nitrógeno y azufre crean lluvia ácida, que fertiliza los cuerpos de agua desde la atmósfera.
Consecuencias de la eutrofización de las aguas
La eutrofización tiene graves consecuencias para los ecosistemas acuáticos y los seres humanos. Al interferir en la cadena trófica, se altera el ecosistema, reduciendo la biodiversidad y provocando la proliferación de especies invasoras. Además, la descomposición del agua produce sustancias tóxicas y malos olores, lo que afecta a la salud humana y la economía local.
Las zonas sin oxígeno (zonas muertas) creadas por la eutrofización impiden la vida acuática, y el agua eutrofizada pierde su calidad para actividades recreativas y comerciales.
Por último, las floraciones de algas tóxicas pueden llegar a ser peligrosas, afectando a animales en el área y a las personas que consumen agua o pescados contaminados.
La eutrofización es un proceso dañino que, aunque natural, ha sido acelerado por la actividad humana. Si bien sus efectos son devastadores, es posible frenar o revertir el proceso si se toman medidas adecuadas para reducir el aporte de nutrientes en los cuerpos de agua.