Francia, con grandes problemas de polución agrícola que contamina sus ríos, acaba de ser condenada por el Consejo de Justicia de la Unión Europea (CJUE). Esta decisión es un preludio a una posible multa de varias decenas de millones de euros.
Se trata aquí de un viejo asunto con los nitratos y la incapacidad de París para adaptarse a una directiva europea que data de 1991. Este contencioso se basa precisamente en en la subestimación de las «zonas vulnerables» que habría que proteger de forma imperativa, o dicho de otra manera, en la falta de autoridad del Estado para hacer que se respeten los vertidos que contienen nitratos, y que actualmente superan los 50 miligramos por litro.
La CJUE prepara una segunda llamada al orden que debería denunciar de aquí a finales de 2013 la fragilidad de los programas para corregir la situación en esas mismas zonas.
Más información – La calidad del agua