
En los últimos años, España ha sido testigo de un rechazo sistemático hacia las energías renovables, particularmente por parte de su gobierno. El llamado “impuesto al sol” ha reflejado una postura poco favorable hacia el autoconsumo solar. Sin embargo, los ciudadanos, conscientes de las ventajas de la energía solar, deben considerar seriamente el uso de paneles solares.
A pesar de las barreras impuestas, la instalación de paneles solares sigue siendo viable y beneficiosa, especialmente si la potencia de la instalación es inferior a 10 kW para evitar cargas impositivas. El futuro es incierto, pero el cambio de postura política podría mejorar las condiciones.
¿Qué implica poner paneles solares en mi vivienda o negocio?
Instalar paneles solares no solo es una opción ecológica, sino también una inversión con beneficios tangibles a largo plazo. A medida que el precio de la electricidad sigue siendo incierto y la necesidad de fuentes renovables crece, los paneles solares son una opción cada vez más accesible para muchos hogares y empresas.
Los paneles solares son relativamente fáciles de instalar en techos o cualquier área con buena exposición solar. Dependiendo de la potencia instalada, los beneficios pueden aparecer en la factura desde el primer día, ya que lo que consumes es lo que produces.
Las ventajas principales incluyen:
- Disminución de la dependencia energética de fuentes externas.
- Reducción de la huella de carbono.
- Ahorrar en la factura de la luz, ya que consumes energía generada en tu techo.
En cuanto al excedente de energía, aunque las baterías han mejorado, almacenar electricidad sigue siendo caro y, en situaciones cotidianas, no siempre es esencial. En cambio, España, aunque sin una ley formal de balance neto, permite inyectar el exceso a la red, aunque sin recibir una contraprestación actualmente favorable. Sin embargo, diversos países ya aprovechan el balance neto, como Alemania, Portugal o Italia, lo que los convierte en pioneros en este modelo energético.
¿Merece la pena instalar paneles solares?
En la actualidad y bajo las condiciones legales vigentes, la respuesta es sí, especialmente para instalaciones pequeñas. La rentabilidad está garantizada siempre que se utilicen paneles solares de buena calidad y se hagan estudios adecuados para adaptar la instalación a las necesidades energéticas del inmueble. El autoconsumo fotovoltaico ya supone un gran ahorro y, una vez se apruebe el balance neto, el beneficio será aún mayor.
El famoso “impuesto al sol” no afecta a instalaciones menores de 10kW, lo cual abre la ventana para hacer inversiones que, sin ser tan ambiciosas en términos de capacidad instalada, son igual de efectivas para pequeños negocios o viviendas.
¿Qué costos tiene instalar paneles solares?
Si te decides a instalar un sistema de autoconsumo, hay varios costos asociados que debes tener en cuenta:
- Paneles solares: Es el componente principal de la infraestructura. El precio varía según la calidad y potencia de los mismos.
- Inversor solar: Este dispositivo transforma la corriente continua generada por los paneles en electricidad apta para el uso.
- Instalación: Dependiendo de la complejidad de tu proyecto y las características del inmueble, puede tener un coste adicional.
Un aspecto importante es la verificación que realiza la distribuidora eléctrica: una vez instalada, hay un costo de unos 200 euros para la validación oficial del proyecto.
¿Qué pasa si no legalizo mi instalación?
Una instalación solar no legalizada puede conllevar multas elevadas de hasta 60 millones de euros. Increíblemente, la legislación castiga más severamente una instalación no registrada de autoconsumo que un problema nuclear.
El registro de la instalación no solo es crucial para evitar sanciones, también para que la red eléctrica pueda calcular mejor el suministro y la demanda. Además, los conocidos contadores inteligentes, que muchas personas han tenido problemas para entender, podrían incluso contabilizar el exceso de energía que produces como si fuera un consumo, aumentando tu factura injustamente.
En otras palabras, una instalación no registrada puede provocarte pérdidas en lugar de ahorros.
¿Por qué el gobierno no fomenta el autoconsumo?
El autoconsumo no ha sido una prioridad para los gobiernos anteriores en España. El actual sistema energético no ha hecho más que beneficiar a las grandes empresas eléctricas mientras que los ciudadanos se ven obligados a seguir pagando precios elevados por la factura de la luz.
El balance neto está aprobado en muchos países de la Unión Europea y otros que han entendido que no aprovechar el autoconsumo es una decisión poco eficiente. En cambio, en España, el autoconsumo ha sido tratado más como una amenaza a los intereses de las grandes compañías que como una solución para el ahorro energético.
Es importante destacar que mejorar el autoconsumo ayuda a disminuir los precios energéticos a largo plazo. Cuando más ciudadanos pueden generar su propia energía, la demanda en la red eléctrica disminuye, lo que conlleva una bajada general del costo energético.
Afortunadamente, la situación no es estática y, aunque con dificultades políticas, el autoconsumo fotovoltaico sigue en crecimiento en España.
A pesar de las dificultades políticas y los impuestos innecesarios, el autoconsumo solar sigue siendo una de las opciones más prometedoras para ahorrar en energía y contribuir a un futuro más verde. A medida que mejore el marco legislativo y se eliminen barreras como el famoso impuesto al sol, la rentabilidad de los paneles solares seguirá en aumento, beneficiando tanto a los ciudadanos individuales como al país en su conjunto.