Hoy vamos a hablar acerca de un tipo de energía que se genera en gran parte del mundo a partir de la combustión de combustibles fósiles en centrales especializadas. Este tipo de energía, denominado energía termoeléctrica, es responsable de aproximadamente el 80% de la electricidad consumida mundialmente. Entre los combustibles fósiles más empleados encontramos el carbón, petróleo, gas natural y, en menor medida, la biomasa.
A lo largo de este artículo, profundizaremos en las características de la energía termoeléctrica, sus tipos, las ventajas que ofrece y los inconvenientes que presenta.
Características principales
La energía termoeléctrica es una energía térmica que se transforma en energía eléctrica mediante el uso de calor. El mecanismo general consiste en elevar la temperatura del agua hasta convertirla en vapor, el cual es usado para accionar una turbina. Esta transformación de la energía térmica en energía cinética pone en funcionamiento un generador que produce electricidad.
La principal fuente de calor son los combustibles fósiles, aunque también se utilizan otras fuentes que detallaremos más adelante. El agua es el fluido más común, pero en algunos casos se emplean otros líquidos para aumentar la eficiencia en la generación. El vapor generado mueve las turbinas y, a través de un generador, se produce la electricidad necesaria.
Este sistema de generación de energía ha sido fundamental históricamente, y sigue siendo ampliamente empleado en todo el mundo debido a su capacidad para generar grandes cantidades de electricidad de manera continua.
Tipos de energía termoeléctrica
La energía termoeléctrica se clasifica según la fuente de combustible utilizada para generar el calor necesario. A continuación te explicamos los principales tipos:
Energía termoeléctrica de combustibles fósiles
Este tipo de energía es el más empleado y consiste en la quema de combustibles fósiles (carbón, gas natural o petróleo) para generar el calor que convierte el agua en vapor. Esta categoría representa una gran parte de la producción de electricidad a nivel mundial, pero tiene serias consecuencias ambientales por las emisiones de gases contaminantes.
Aunque el uso del carbón ha disminuido en algunos países debido a su alto coste y el impacto ambiental, sigue siendo una de las principales fuentes de generación de electricidad. El gas natural también ha ganado terreno en los últimos años debido a que sus emisiones son menores en comparación con el carbón.
Energía termoeléctrica de origen nuclear
En este tipo de centrales, el calor no proviene de la quema de combustibles fósiles, sino de la fisión de átomos, generalmente uranio o plutonio. Durante el proceso de fisión nuclear, se genera una gran cantidad de calor que calienta el agua y produce vapor. El vapor, al igual que en las centrales convencionales, impulsa las turbinas para generar electricidad.
A pesar de que las emisiones de carbono en las centrales nucleares son prácticamente nulas, existen preocupaciones por los residuos radiactivos y el riesgo asociado a posibles accidentes nucleares.
Energía termoeléctrica de origen renovable
Las energías termoeléctricas renovables incluyen tecnologías que emplean recursos naturales para generar el calor necesario, como la energía geotérmica y la termosolar.
- Geotérmica: Esta energía proviene del calor natural bajo la superficie terrestre y es usada en lugares con una fuerte actividad geotérmica. El vapor de agua generado puede ser directamente utilizado para mover las turbinas.
- Termosolar: Se basa en la concentración de la radiación solar para generar suficiente calor que convierta el agua en vapor y posteriormente mueva las turbinas.
Aunque estas fuentes renovables tienen un impacto ambiental mucho menor, su participación en la producción global de electricidad todavía es limitada debido a la localización geográfica específica requerida para su uso.
Ventajas de la energía termoeléctrica
Las centrales termoeléctricas tienen varias ventajas que las han posicionado como una de las principales fuentes de energía en todo el mundo:
- Costo de construcción: Son más rápidas y económicas de construir en comparación con las centrales hidroeléctricas u otros tipos de plantas. Esto permite que los países cubran sus necesidades energéticas más rápidamente.
- Ubicación: Pueden ser instaladas cerca de las zonas de consumo, lo que reduce considerablemente los costes de transmisión de energía.
- Alternativa para países sin recursos renovables: Los países con escasez de fuentes de energía renovable pueden utilizar combustibles fósiles como alternativa para mantener su estabilidad energética.
Además, la energía termoeléctrica es capaz de generar electricidad de manera constante, lo que representa una ventaja sobre las energías renovables intermitentes como la solar o la eólica.
Desventajas de la energía termoeléctrica
Sin embargo, este tipo de energía también tiene desventajas significativas:
- Contaminación: La quema de combustibles fósiles libera una gran cantidad de dióxido de carbono y otros contaminantes en la atmósfera, lo que contribuye directamente al calentamiento global y problemas de salud.
- Dependencia de los combustibles fósiles: Los combustibles fósiles son recursos no renovables que eventualmente se agotarán, y la fluctuación en sus precios puede generar un aumento en el coste de la electricidad.
- Impacto en la salud: La contaminación del aire causada por las emisiones de las centrales termoeléctricas ha sido vinculada con enfermedades respiratorias y cardiovasculares en las zonas cercanas a las plantas.
Además, se ha detectado que el vertido de agua caliente en ecosistemas fluviales puede afectar la fauna y flora de las áreas cercanas a las centrales.
Una vez analizados las características, ventajas y desventajas de la energía termoeléctrica, queda claro que sigue siendo una fuente de energía vital para el mundo, pero debe evolucionar hacia otras alternativas más limpias y sostenibles a largo plazo.