En nombre del crecimiento y la inversión, el primer ministro indio, Narendra Modi, ha decidido flexibilizar las normas de protección del medioambiente con el fin de facilitar la construcción de infraestructura y la implantación de polígonos industriales en todo el país. Este impulso a la economía está impactando directamente en el medioambiente, generando serias preocupaciones sobre el equilibrio entre desarrollo y sostenibilidad.
El impacto del crecimiento industrial en el medio ambiente
La aceleración en la creación de nuevas infraestructuras ha sido notable, sin embargo, este progreso trae consigo consecuencias directas sobre el entorno natural. El Consejo Nacional de la fauna y la flora ha aprobado más de 140 proyectos de infraestructura que incluyen la construcción de una presa hidroeléctrica y un gasoducto en el noreste del país, lo cual no tiene precedentes en cuanto a rapidez y cantidad de aprobaciones en tan corto tiempo. Este escenario plantea una pregunta clave: ¿cuáles son las posibles repercusiones de este crecimiento en el frágil ecosistema de la India?
Problemáticas medioambientales asociadas al crecimiento industrial
Con este impulso económico, los problemas ambientales han crecido a la par. La contaminación industrial afecta gravemente los ecosistemas, y el aire y el agua de India han alcanzado niveles críticos de contaminación. De acuerdo con diversos estudios, la contaminación del aire en ciudades como Nueva Delhi llega a niveles de emergencia cada año, especialmente durante el invierno, cuando las partículas en suspensión alcanzan hasta 19 veces el nivel recomendado por la Organización Mundial de la Salud.
Además, el crecimiento industrial también tiene un impacto severo en la biodiversidad, especialmente en especies animales clave como el elefante y el tigre. Estos animales habitan áreas que ahora están siendo invadidas por infraestructuras industriales y agrícolas. En la India se estima que hay más de 172 especies en peligro de extinción, muchas de ellas afectadas por la destrucción de sus hábitats naturales debido al crecimiento de las ciudades y la expansión de áreas industriales.
La contaminación del aire: un problema creciente
El aumento de las actividades industriales ha incrementado las emisiones de gases contaminantes como el dióxido de azufre y el monóxido de carbono, lo cual afecta severamente la calidad del aire en las principales ciudades del país. Según el último informe del Índice de Calidad del Aire de India, más del 80% de la población vive en áreas donde la contaminación supera los estándares recomendados. Este deterioro de la calidad del aire provoca problemas respiratorios entre los residentes, un aumento en las enfermedades cardiovasculares y es responsable de millones de muertes prematuras cada año.
Además de la industria, otros factores como el aumento en el uso de vehículos privados y la quema de cultivos contribuyen al empeoramiento de la calidad del aire. Las investigaciones apuntan a que la contaminación aérea aumenta incluso la vulnerabilidad de la población frente a enfermedades como el coronavirus, lo que plantea una crisis de salud pública de largo alcance.
Procedimientos de auditoría y regulación ambiental ineficientes
A pesar de contar con una vasta legislación ambiental, su aplicación ha sido débil. Según un estudio realizado por el Centro para la Ciencia y el Medio Ambiente (CSE), el crecimiento de la economía india ha duplicado su volumen en los últimos 20 años, pero las emisiones industriales se han multiplicado por cuatro. Esta desinformación y la falta de transparencia dificultan las acciones correctivas necesarias.
Un proyecto clave que busca mitigar estos efectos es la auditoría ambiental de las industrias. En Gujarat, se lleva a cabo un programa de auditoría que pretende mejorar la precisión de los informes sobre emisiones industriales, pero, como indican algunos estudios recientes, los incentivos para estos auditores están sesgados, lo que limita la efectividad de las medidas implementadas.
El uso del carbón y su influencia en la contaminación ambiental
India sigue siendo uno de los principales consumidores de carbón en el mundo, y la dependencia de este combustibles fósil sigue siendo un lastre en los esfuerzos nacionales por mejorar la calidad del aire y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. El carbón representa casi el 70% de la producción eléctrica de India, y aunque el país ha avanzado en la instalación de energías renovables como la solar y eólica, la realidad es que gran parte de la energía sigue proviniendo de fuentes no renovables.
La quema de carbón no solo afecta la calidad del aire, sino que también genera impactos significativos en la salud humana. En particular, la quema de carbón emite partículas de dióxido de azufre, que son directamente responsables de enfermedades pulmonares y cardiovasculares. Solo en 2017, más de un millón de personas murieron en India como resultado de la contaminación del aire.
Iniciativas gubernamentales para combatir la crisis ambiental
En los últimos años, el gobierno indio ha adoptado algunas medidas para mitigar los efectos negativos del crecimiento industrial sobre el medioambiente. En 2018, India fue sede del Día Mundial del Medio Ambiente bajo el lema «Sin contaminación por plásticos». Desde entonces, ha promovido iniciativas para reducir el uso de plásticos de un solo uso, y ha lanzado programas de regulación ambiental para el control de emisiones en la industria del carbón.
Además de esto, el gobierno ha lanzado el Plan Nacional de Aire Limpio, que tiene como objetivo reducir la contaminación por partículas en suspensión en las principales ciudades. A través de este plan, se están instalando sistemas de monitoreo de emisiones, y se han destinado fondos para la promoción de energías renovables como la solar y la eólica, que tienen un papel clave en la descarbonización de la economía de India.
Un aspecto crucial es también la reforestación y la conservación de la fauna y flora. India ha comenzado a implementar políticas de protección ambiental con la creación de santuarios de vida silvestre y reservas de biosfera para garantizar la supervivencia de especies en peligro.
Así, aunque el crecimiento económico de India sigue siendo prioritario, el país está comenzando a tomar con más seriedad los retos ambientales que enfrenta. La adopción de energías renovables y una mayor transparencia en la auditoría ambiental son pasos cruciales para equilibrar el desarrollo industrial con la preservación del entorno natural.