Para ahorrar en costes en la agricultura, se utiliza la energía solar para cubrir la demanda energética. Hoy día, los sectores de la agricultura y el regadío ya están concentrando el 25% de las plantas de energía solar fotovoltaica para el autoconsumo que se están levantando en España.
Incluso con el pasado impuesto al sol, el aumento del uso de la energía solar en este sector es alentador. Estos datos los recoge la Unión Española Fotovoltaica (UNEF) y la Federación Nacional de Comunidades de Regantes (FENACORE).
Más energía solar en el sector agrícola
El principal motivo por el que se desarrolla cada vez más la energía solar en el sector agrícola es la subida de la factura eléctrica. Durante los últimos ocho años, los precios de la electricidad se han incrementado exponencialmente, llegando en algunos casos a subir hasta un 1000%, lo que ha motivado a los agricultores a buscar energías alternativas.
Como resultado, en los últimos tres años se han instalado hasta 25 megavatios en plantas solares dentro del sector agrícola en España. Estas instalaciones permiten a los regantes ahorrar hasta un 60% en electricidad una vez que la inversión en las placas solares está amortizada.
El coste de instalación de estos sistemas ha disminuido notablemente en los últimos años. Las empresas aprovechan fondos estructurales europeos para ofrecer subvenciones que cubren hasta el 65% de los costes iniciales. Esto ha facilitado que muchos agricultores se atrevan a apostar por la energía solar.
Sistemas de autoconsumo: bombeo y riego solar
El bombeo solar es una de las aplicaciones más comunes de la energía solar en explotaciones agrícolas. Este sistema permite utilizar la energía captada por los paneles solares para alimentar bombas de agua que transporten el agua hacia los sistemas de riego. Esto es esencial en los meses más cálidos, donde el riego más intensivo coincide con las horas de mayor insolación, haciendo que la energía solar pueda alimentar las bombas sin costes añadidos.
Además, este sistema también está ayudando a preservar más agua. Al proporcionar sombra parcial a los cultivos y a las balsas de riego, las placas solares ayudan a mantener temperaturas más bajas y reducen la evaporación, lo que a su vez minimiza la pérdida de recursos hídricos.
Coste de un proyecto de energía solar para riego
El coste de un proyecto de energía solar para riego varía según la superficie del terreno, las condiciones climáticas, la cantidad de agua necesaria y las especificaciones del sistema fotovoltaico. De manera general, un sistema de riego solar puede tener un coste que oscila entre los 20.000 y 50.000 euros. Estos costes incluyen la instalación de placas solares, inversores, baterías, controladores y bombas de agua.
Es importante destacar que, aunque el coste inicial pueda parecer elevado, los beneficios a largo plazo son significativos. La reducción de los costes energéticos y la disminución de la dependencia de combustibles fósiles hace que la inversión se amortice en un plazo razonable. Asimismo, existen programas de apoyo y financiación que facilitan la adopción de la energía solar en la agricultura, como el Programa de Desarrollo Rural del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER).
Beneficios del autoconsumo solar en la agricultura
1. Sostenibilidad y reducción de la huella de carbono: Al utilizar energía solar, se reduce la dependencia de combustibles fósiles, lo que a su vez disminuye las emisiones de CO2 y la huella de carbono de las explotaciones agrícolas.
2. Ahorro en costes energéticos: Uno de los beneficios más notables es el ahorro económico. Los agricultores pueden reducir significativamente sus costes de energía, especialmente en las temporadas donde la demanda eléctrica es mayor.
3. Optimización del terreno: Al instalar paneles solares en áreas no aptas para el cultivo, los agricultores pueden aprovechar mejor su terreno y, en algunos casos, también utilizar el área bajo las placas para el pastoreo de ganado.
4. Capacidad de almacenamiento: Un aspecto crucial de la energía solar es la posibilidad de almacenar energía en baterías solares, lo que permite su uso durante la noche o en días nublados. Este almacenamiento garantiza que los sistemas de riego, iluminación y otros equipos continúen funcionando sin interrupciones.
Energía agrovoltaica: una alianza para la sostenibilidad
La energía agrovoltaica es una de las soluciones más innovadoras en el sector agrícola. Consiste en instalar paneles solares sobre terrenos de cultivo, creando una sinergia que beneficia tanto a la producción agrícola como a la generación de energía solar. Estos paneles proporcionan sombra parcial que protege los cultivos de temperaturas extremas y reduce la evaporación del agua, lo que mejora el rendimiento agrícola.
Los sistemas agrovoltaicos permiten maximizar el uso de la tierra, en lugar de competir por ella. Además, mediante la evapotranspiración de las plantas, se logra mantener una temperatura adecuada para que los paneles solares trabajen de manera más eficiente.
Existen dos tipos de instalaciones principales en el ámbito agrovoltaico:
- Sistemas de soportes fijos: Colocados a varios metros de altura sobre el cultivo, permiten que la maquinaria agrícola acceda sin problemas.
- Invernaderos solares: Donde se sustituyen los tejados de los invernaderos por plantas de generación solar que aprovechan la energía del sol.
En la agricultura moderna, incorporar la energía solar no solo es un paso hacia la sostenibilidad, sino también una estrategia óptima para reducir costes y aumentar la eficiencia de los cultivos.
El futuro de la energía solar parece prometedor y los agricultores que ya han adoptado este recurso están viendo cómo mejora tanto su rentabilidad como su huella medioambiental.