Según el Observatorio Sectorial DBK de INFORMA, la potencia instalada acumulada de energías renovables en España a finales de 2016 alcanzó los 32.846 megavatios, lo que representaba un crecimiento del 0,2% respecto al año anterior. Esta cifra reflejaba una tendencia de crecimiento lenta en el país.
La energía eólica lideraba esta categoría, aportando 70,1% de la potencia instalada, seguida por la energía solar fotovoltaica con 14,2% y la termoeléctrica con un 7%. El restante 8,7% provenía de plantas hidráulicas y de generación a partir de biomasa. En este contexto, España empezaba a consolidarse como un referente en la transición hacia las energías limpias.
El estado de las energías renovables en 2016
En 2016, España contaba con 1.359 parques eólicos en funcionamiento, totalizando una capacidad de 23.026 megavatios. La energía solar fotovoltaica también avanzaba con 61.386 plantas conectadas a la red, sumando una potencia instalada de 4.674 megavatios, una cifra que creció un 0,3% con respecto a 2015. Por su parte, la energía termoeléctrica, estancada desde 2013, mantenía sus 51 centrales con una capacidad total de 2.300 megavatios.
Asimismo, las diez empresas más importantes en términos de potencia instalada agrupaban el 57% de la capacidad instalada. En el caso de la termoeléctrica y la eólica, el mercado era aún más concentrado, con un 73% y 70% respectivamente. Sin embargo, el sector fotovoltaico se caracterizaba por ser mucho más atomizado, con solo el 13% en manos de grandes compañías.
Subastas de energía renovable: Una herramienta clave para la transición
Las subastas de energías renovables han sido un mecanismo crucial para fomentar el crecimiento en este sector en España. En 2017, la tercera subasta adjudicó más de 5.000 MW en potencia renovable, siendo ACS, a través de su filial Cobra, el gran vencedor, adjudicándose 1.550 MW de energía solar fotovoltaica. Forestalia también se llevó un 316 MW de fotovoltaica, mientras que Enel Green Power España logró 339 MW.
En esta subasta, las ofertas alcanzaron el 65% de descuento respecto al valor estándar de inversión, lo que repercutirá positivamente en los precios futuros para los consumidores. Este sistema de adjudicación en grandes lotes ha sido un factor que ha impulsado la concentración en el sector, destacándose especialmente en los segmentos de energía solar y eólica.
La renovable en 2023: un cambio significativo
En 2023, el panorama de las energías renovables en España ha cambiado drásticamente. La potencia instalada de energía solar fotovoltaica aumentó un 28% en un solo año, alcanzado los 25.549 MW, consolidando así a España como el segundo país con mayor capacidad fotovoltaica en Europa. Junto con la eólica, que sumó 661 MW adicionales, estas dos tecnologías han liderado el crecimiento renovable en el país.
Por primera vez en la historia, en 2023, más del 50% del mix energético español provino de energías renovables, batiéndose récords de producción. La eólica sigue destacándose como la principal fuente de energía, con un 23,5% del total. La hidráulica, influenciada por un año de buenas lluvias, también jugó un papel clave, aumentando su generación en un 41,1% respecto al año anterior.
Impacto económico de las energías renovables
En términos económicos, las renovables generaron un volumen de ingresos significativo. En 2016, se registraron 7.069 millones de euros en ingresos de la venta de energía eólica y solar, a pesar de haber sido un 9,3% inferior al año anterior. Dichos ingresos provinieron principalmente del sector solar, que aportó 4.212 millones de euros, divididos entre fotovoltaica y termoeléctrica.
El crecimiento continuado de las renovables no solo impacta en la reducción de las emisiones de CO2, sino que también ha abierto oportunidades industriales. Según la Redeia, se espera que para el 2026, 67% de la producción energética de España sea renovable, lo que posicionará a España como uno de los líderes europeos en la materia.
El camino hacia una mayor eficiencia energética y sostenibilidad sigue siendo impulsado por la búsqueda de un sistema energético robusto y competitivo. Las subastas, con el apoyo del gobierno, aseguran que las energías renovables continúen ganando peso en el mix energético nacional. La apuesta por las renovables en España no solo beneficia al medioambiente, sino también al bolsillo del consumidor.