Hace 8 años conocimos que Costa Rica estuvo dependiendo en el 99% de las energías renovables. Esto ha convertido a Costa Rica en uno de los países que va rumbo a un futuro limpio y sostenible. Este logro es un paso fundamental para dejar un planeta mejor para las generaciones futuras. A pesar de los avances, aún quedan desafíos por superar, y los acuerdos internacionales avanzan lentamente.
Costa Rica, sin embargo, no es solo un paraíso verde para los turistas, sino también uno de los pioneros en energías renovables. Desde hace años, esta pequeña nación ha generado el 100 por ciento de su electricidad a partir de fuentes renovables durante varios periodos, llegando en ocasiones a más de 300 días funcionando sin combustibles fósiles.
121 días sin combustibles fósiles
Un hito importante para Costa Rica fue lograr mantener su electricidad 100% renovable durante 121 días seguidos. Este logro es solo uno de muchos ejemplos del compromiso del país con las fuentes de energía limpias. Costa Rica casi ha alcanzado su objetivo de generar toda su energía sin usar combustibles fósiles. En 2015, ya había logrado un impresionante 99% durante 285 días. La pregunta es: ¿Cómo lo logra este pequeño país de América Central?
La clave del éxito de Costa Rica radica en su geografía particular y su clima. El país cuenta con una notable abundancia de fuentes renovables, lo que le ha permitido depender en gran medida de ellas. La principal fuente de energía en Costa Rica es la hidroeléctrica, que representa el 75% de su producción energética. Sin embargo, el país también cuenta con recursos significativos de energía geotérmica, eólica, solar y biomasa.
Fuentes de energía renovables en Costa Rica
El éxito de Costa Rica en el uso de energías renovables depende de varios factores. A continuación, repasamos las principales fuentes de energía que han contribuido a este hito:
- Hidroelectricidad: La energía hidroeléctrica es la columna vertebral del sistema energético de Costa Rica. Con numerosos ríos y una geografía favorable, el país ha creado un complejo sistema de represas que permiten aprovechar estas corrientes para generar electricidad. La represa Reventazón es una de las más grandes de Centroamérica, generando suficiente energía para abastecer a cientos de miles de hogares.
- Energía geotérmica: La energía geotérmica ha sido clave para diversificar la matriz energética de Costa Rica. El país explota sus recursos volcánicos para extraer energía geotérmica, que constituye una fuente estable y constante durante todo el año.
- Energía eólica: Gracias a los fuertes vientos en ciertas zonas, la energía eólica también juega un rol importante, generando alrededor del 10% de la electricidad del país.
- Solar y biomasa: Aunque menos significativas que las anteriores, estas fuentes de energía complementan el sistema energético costarricense. La energía solar ha ganado terreno en zonas rurales y la biomasa representa una alternativa sostenible usando desechos agrícolas.
Desafíos climáticos: La sequía como reto
A pesar de sus logros, Costa Rica no se ha librado de los desafíos inherentes al uso de fuentes de energía renovables. Uno de los desafíos más recientes ha sido la sequía, que afectó al país en 2023, reduciendo su dependencia de la energía hidroeléctrica. Durante los periodos de escasez de lluvias, el país ha tenido que recurrir temporalmente a la quema de combustibles fósiles para satisfacer la demanda energética.
El gerenciamiento del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), la entidad encargada de la gestión de la energía, ha sido clave para mitigar los efectos de la sequía mediante la diversificación de las fuentes de energía.
A pesar de estas dificultades, en 2022 Costa Rica alcanzó un 98% de energía renovable en su matriz, y aunque en 2023 la cifra cayó ligeramente al 95% debido a la sequía, sigue siendo un ejemplo a nivel mundial.
El papel de la política pública en Costa Rica
El éxito de Costa Rica no hubiera sido posible sin décadas de políticas públicas que apoyaran el desarrollo de energías limpias. Desde la creación del ICE en 1949, el país ha invertido de manera sostenida en infraestructura hidroeléctrica, geotérmica y, más recientemente, eólica.
El gobierno costarricense también ha promovido la descarbonización del país a través de diferentes iniciativas. En 2021, el entonces presidente Carlos Alvarado fue invitado a Alemania para compartir sus experiencias con la excanciller Angela Merkel sobre el plan de descarbonización que lideraba Costa Rica. Este plan tiene como objetivo alcanzar la carbono neutralidad en los próximos años, un esfuerzo que incluye no solo las fuentes de generación eléctrica, sino también el transporte y la industria.
Proyectos y avances futuros
Incluso con sus dificultades recientes, Costa Rica sigue liderando en innovación energética. En los próximos años, el país espera no solo diversificar sus fuentes de energía, sino también consolidar su sistema. Uno de los proyectos más importantes en marcha es la expansión de las plantas eólicas y solares con el fin de reducir la dependencia de la hidroeléctrica, especialmente en años de sequía.
Además, se siguen desarrollando proyectos de energía comunitaria, como el caso exitoso de Coopesantos, una cooperativa que maneja un parque eólico en el sur de San José, y que ha garantizado energía limpia para más de 53,000 personas. Este tipo de proyectos no solo proporcionan energía limpia, sino que también ayudan a estabilizar los costos de la electricidad, lo cual es crucial en un contexto global de aumento de costos.
Retos y oportunidades
Sin embargo, no todo es positivo. El cambio climático y el regreso de un modelo de explotación de combustibles fósiles en algunos sectores de la política costarricense han planteado desafíos. El actual presidente, Rodrigo Chaves, ha propuesto explorar las reservas de gas natural del país, lo que generaría un retroceso en los logros alcanzados en energía renovable.
En un contexto de sequía y disminución de las precipitaciones, también es esencial seguir diversificando la matriz energética, lo que implica aumentar la inversión en energías solar, eólica y biomasa.
Costa Rica ha sido un país pionero en la integración de las energías limpias en su matriz energética. A pesar de los retos que enfrenta en el futuro, su historia de compromiso con el medioambiente muestra que es posible lograr una transición hacia un modelo energético más sostenible y menos dependiente de los combustibles fósiles.