Cuando llega el invierno, toca pensar en cómo abrigarse al llegar el frío. Una de las dudas más frecuente es que se está viendo en la actualidad es si es mejor la aerotermia o el gas natural para la calefacción. La aerotermia ha demostrado ser un sistema muy eficiente, pero el gas natural no se queda atrás.
En este artículo vamos a realizar una comparativa entre la aerotermia y el gas natural para ver cuál de los dos es una mejor elección para la calefacción de tu hogar.
¿Qué sistema es más seguro?
La seguridad que proporciona cada sistema se basa en su funcionamiento. La combustión se produce en las calderas de gas y siempre existe riesgo de fugas de gas, incendios y explosiones. Además, la combustión siempre produce humo, lo que puede suponer un peligro para la salud si acaba almacenado en un lugar mal ventilado.
En la aerotermia no tenemos estos problemas porque no hay combustión y funciona únicamente con electricidad. Por tanto, no existe riesgo de incendio, explosión o humo. Las calderas de gas ofrecen un gran aumento de la seguridad, aunque la mejor forma de evitar el riesgo es utilizar un sistema de calefacción sin combustión.
La combustión siempre produce dióxido de carbono, óxidos de nitrógeno y otros gases que terminan en la atmósfera. En un sistema de aerotermia no se produce combustión, por lo que no es posible escape de gases tóxicos a la atmósfera.
Comparativa de eficiencia entre aerotermia y gas natural
Las bombas de calor de aerotermia son capaces de absorber el calor del aire exterior y transferirlo al interior del edificio. En términos de rendimiento térmico, que es lo que nos interesa en este apartado, es perfecto. Para que una bomba de calor funcione, debe estar conectada a la red. Consume 1 kW de energía y entrega 4 kW de energía.
En cuanto a la caldera de gas, por cada kilovatio consumido se producen 1,09 kilovatios de electricidad, mucho menos que con las bombas de calor de aerotermia. Este valor se consigue en las calderas de condensación instaladas en los hogares actualmente. En comparación con las calderas de gas anteriores, la eficiencia energética no alcanza la unidad.
Mantenimiento de aerotermia o gas natural
La mayor diferencia entre los sistemas de aerotermia y las calderas de gas es sin duda la combustión, que vuelve a pasar a primer plano cuando analizamos el mantenimiento necesario. Cuando se quema gas, se producen residuos en la caldera. La acumulación de estos residuos puede dificultar su drenaje e impedir su funcionamiento. Por tanto, requiere más mantenimiento que el calor del aire. El sistema no funciona por combustión y no requiere salida de humos.
Estos dos sistemas se utilizan para calentar el interior del edificio y obtener agua caliente sanitaria. La diferencia es que el calor de la aerotermia también se puede utilizar para enfriar edificios en los días calurosos.
Esto se debe a que las bombas aerotérmicas tienen un sistema inversor. Se caracteriza por la capacidad de captar calor del aire exterior para calentar la casa en invierno y recoger calor del interior en verano para enfriar la casa.
Desde una perspectiva total, la utilización de la aerotermia será mayor a lo largo del año. La caldera de gas no sirve para refrigerar el interior, tendremos que utilizar un sistema adicional.
Precio de cada una
¿Cuánto cuesta calentar una casa con caldera de gas? Si tenemos energía térmica a gas, ¿a cuánto asciende este dinero? Para calcular el precio del kilovatio-hora de calor es necesario conocer la cantidad de energía que se debe producir y el coste por kilovatio-hora de energía que utilizamos.
Vamos a suponer que necesitamos 10 kWh para calentar nuestra casa. Para determinar la energía térmica necesaria para obtener una determinada cantidad de energía térmica, debemos dividir estos 10 kWh entre 1,09 si tenemos una caldera de gas o 4 si tenemos una bomba de aerotermia. Estos valores los hemos visto en el apartado que muestra la eficiencia de los dos sistemas.
Por tanto, para producir 10 kWh, la caldera de gas debe producir 9,2 kWh. Y para calentar el aire necesitaremos 2,5 kWh. Conociendo estas cifras hay que calcular el coste de esos kilovatios-hora. En ambos casos los precios varían mucho porque dependen de la empresa y de si se trata de un mercado regulado o libre. Haremos nuestros cálculos asumiendo que estamos en un mercado regulado.
Hemos adoptado una tarifa de gas de 0,07 €/kWh, que es una cifra aproximada para principios de 2023. Multiplica esa cifra por 9,2 para obtener 0,64 euros. Para la electricidad, utilizamos el precio de electricidad más alto del mercado regulado, que es 0,19 EUR/kWh. Multiplica por 2,5 kWh y obtienes 0,47 euros.
La aerotermia es más favorable a la hora de calcular los costes energéticos, aunque hay más factores a considerar, incluido el precio de instalación, que es mucho más elevado que el de instalar una caldera de gas natural.
Vida útil y medioambiente
La vida útil de la calefacción tradicional de gas natural es de unos 10 años, sin embargo, con un mantenimiento adecuado puede durar más. Esta durabilidad es ampliamente superada por los sistemas de aerotermia cuya vida útil puede alargarse hasta unos 20 años, o incluso más dependiendo del cuidado del mantenimiento. La razón principal de esta diferencia es que el calentamiento por combustión supone una mayor tensión para la maquinaria que los ciclos de calentamiento y enfriamiento de aire.
Por último, pero no menos importante, discutimos el impacto ambiental de estas tecnologías. El calentamiento del gas natural durante la combustión produce dióxido de carbono contaminante que se libera a la atmósfera, contribuyendo al efecto invernadero y al cambio climático.
Por sí sola, la aerotermia no emite emisiones y no produce residuos de ningún tipo. Esto no significa que el sistema sea 100% renovable, ya que esto depende del suministro energético de la bomba de calor. Pero está claro que la energía térmica del gas tiene un impacto mucho menor en el medio ambiente que la calefacción por gas natural.
Espero que con esta información puedan conocer más sobre qué es mejor si la aerotermia o el gas natural.