La Central Nuclear de Cofrentes, ubicada en Cofrentes, Valencia, es una de las plantas de generación eléctrica más importantes de España. Desde su puesta en marcha en 1984, ha hecho una contribución significativa a la producción de energía eléctrica del país. Esta planta nuclear, propiedad de Iberdrola, utiliza un reactor de agua en ebullición (BWR-6), una tecnología que también ha sido implementada en otras plantas de renombre global.
A lo largo de su operación, la Central Nuclear de Cofrentes ha realizado diversas actualizaciones tecnológicas para mejorar su seguridad y eficiencia. En este artículo, describiremos en detalle el funcionamiento de la central, sus características técnicas, los incidentes que han marcado su historia y la evolución de sus medidas de seguridad.
Objetivos de la Central Nuclear de Cofrentes
El objetivo fundamental en la gestión de la Central Nuclear de Cofrentes es el compromiso con la seguridad, la eficiencia y el respeto por el medio ambiente. Para lograrlo, Iberdrola ha adoptado varios principios clave que guían el funcionamiento de la planta:
- Mantenimiento integral: La central se mantiene en las mejores condiciones posibles, actualizando sus sistemas técnicos y de seguridad de manera continua.
- Seguridad operacional: La seguridad está garantizada mediante la implementación de las tecnologías más avanzadas.
- Formación continua: Es crucial que todo el personal de la planta esté adecuadamente capacitado para minimizar riesgos laborales y mejorar la operación.
- Transparencia: La planta mantiene informada a la opinión pública sobre su estado para generar confianza y evitar desinformación.
Además, la planta tiene una relación estrecha con la población a nivel educativo y medioambiental. Los ciudadanos y centros educativos pueden visitar las instalaciones para conocer más sobre la energía nuclear, lo que también refuerza su política de transparencia.
Características Técnicas de la Central Nuclear de Cofrentes
La Central Nuclear de Cofrentes cuenta con una potencia instalada de 1.092 MW, lo que le permite generar casi 9.000 millones de kWh anuales, una cantidad suficiente para cubrir el consumo eléctrico de la Comunidad Valenciana. Para lograr esta capacidad, emplea tecnología de reactor BWR-6, una de las más refinadas en el ámbito de la energía nuclear.
El reactor BWR-6 es un sistema de ciclo de agua directo, donde el agua actúa como refrigerante y moderador. Dentro del reactor, el agua se calienta hasta su punto de ebullición, generando vapor que es utilizado para mover las turbinas generadoras de electricidad. Parte del vapor se condensa y regresa al reactor, haciendo que el sistema sea altamente eficiente.
Esta tecnología también se utiliza en plantas tan reconocidas como la de Fukushima Daiichi, lo que ha generado controversias y requerimientos adicionales de seguridad para evitar incidentes similares.
Sistema de Separador de Humedad
Uno de los componentes fundamentales de la central es el separador de humedad. Se encuentra integrado en el sistema del reactor y su principal objetivo es mejorar la calidad del vapor. Mediante un proceso ciclónico sin partes móviles, el separador eleva la pureza del vapor desde un 15 % hasta un 90 %, crucial para evitar daños en las turbinas y mejorar la eficiencia global del sistema.
Bombas de Chorro
Las bombas de chorro desempeñan un papel esencial en la Central de Cofrentes. Existen 20 bombas distribuidas en grupos simétricos alrededor del núcleo, fabricadas en acero inoxidable. Estas bombas aseguran la circulación forzada del refrigerante a través del núcleo, lo que permite al reactor alcanzar mayores potencias.
Barras de Control
Un dispositivo clave para la regulación del reactor es el sistema de barras de control. En la Central Nuclear de Cofrentes, se emplean 145 barras dispuestas de manera cruciforme. Estas barras contienen materiales absorbentes de neutrones como el carburo de boro (CB4) y se utilizan para controlar la reactividad y distribuir la energía dentro del reactor. Con una vida útil de hasta 18 años, juegan un papel crucial en la seguridad del reactor.
Funcionamiento de la Central Nuclear de Cofrentes
El funcionamiento de una planta nuclear como Cofrentes no es diferente en conceptos básicos a otras plantas eléctricas, pero con la diferencia principal de que emplea uranio enriquecido como combustible. El proceso de fisión nuclear es el que genera el calor necesario para crear vapor y, finalmente, producir electricidad.
El Combustible Nuclear
El combustible utilizado en Cofrentes está compuesto de uranio ligeramente enriquecido al 4,2%, procesado en pequeñas pastillas de cerámica dentro de varillas de circonio. Estas varillas, conocidas como elementos combustibles, son capaces de soportar temperaturas extremas dentro del reactor, donde tienen lugar las reacciones nucleares que liberan calor.
Pasos para la Generación de Energía
- El agua en el reactor se calienta con la energía liberada en la fisión nuclear.
- El vapor generado en el reactor se utiliza directamente para accionar una turbina de alta presión.
- Posteriormente, se dirige a una serie de calentadores y secadores que eliminan la humedad del vapor antes de pasar a la turbina de baja presión.
- Finalmente, el vapor se convierte en energía mecánica para mover generadores acoplados a las turbinas, produciendo así energía eléctrica.
El vapor sobrante se condensa nuevamente en agua y regresa al reactor en un ciclo cerrado, lo que maximiza la eficiencia.
Sistema de Refrigeración
El sistema de refrigeración en Cofrentes es crucial para prevenir el sobrecalentamiento. Utiliza un circuito cerrado, donde el agua que enfría el reactor pasa a través de torres de tiro natural de gran tamaño, con 129 metros de altura y 90 metros de diámetro. Esta estructura asegura que el agua se enfríe lo suficiente antes de regresar al reactor.
Además, se extrae agua del río Júcar para cumplir con los requisitos de refrigeración, aunque gran parte de ella se evapora en las torres de refrigeración. El agua sobrante se libera nuevamente al río, cumpliendo con estrictos estándares de control de calidad y regulaciones ambientales.
Incidentes y Críticas a la Central Nuclear de Cofrentes
La Central Nuclear de Cofrentes ha sido objeto de diversas críticas y ha registrado algunos incidentes notables a lo largo de su historia. La central ha enfrentado 10 incidentes notables en 2017, el más grave de los cuales sucedió cuando una avería mecánica fue clasificada como nivel 1 en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares (INES). Aunque fue una avería menor, este tipo de incidentes siempre generan preocupación.
A lo largo de la última década, ha habido múltiples llamamientos por parte de grupos ecologistas como Greenpeace y Tanquem Cofrents para cerrar la planta, ya que su diseño es similar al de la planta de Fukushima. Uno de los incidentes más sonados ocurrió en 2011 cuando activistas de Greenpeace lograron acceder a las instalaciones de la planta para alertar sobre su vulnerabilidad.
Incidentes Menores y Seguridad
Hasta la fecha, los incidentes más serios han sido clasificados como nivel 1 en la INES, lo que indica que se trataba de anomalías sin consecuencias graves para la población o el medio ambiente. En general, la planta ha mostrado una operación estable y cumple con las normativas del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) para minimizar riesgos.
Iberdrola se compromete a continuar invirtiendo en sistemas de seguridad y actualizaciones tecnológicas. Aunque no se ha producido ninguna catástrofe de nivel grave en la planta, el debate sobre su seguridad sigue siendo un tema candente, especialmente debido a la proximidad de la planta al volcán de Cofrentes, aunque este se considera inactivo.
A lo largo de su historia, la planta ha experimentado varias mejoras de capacidad. Se espera que su vida útil final llegue alrededor de 2030, sin embargo, no se descarta que se extienda, como ha sucedido con otras centrales nucleares en España.
El futuro de la planta dependerá de cómo Iberdrola gestione la fase final de operación, así como de las futuras decisiones regulatorias nacionales e internacionales.