España tiene muchas dificultades en el tema de las energías renovables. Invertir en energía limpia es caro y existen impuestos que hacen más difícil la transición energética. Para paliar estos problemas, la Comisión Europea (CE) ha dado el visto bueno a un régimen español en el que hay algunas ayudas públicas para la instalación de energías renovables.
La Comisión Europea ha aceptado este régimen de ayudas para las renovables, puesto que no viola ninguna norma comunitaria y contribuye a cumplir los objetivos en materia del clima. ¿En qué consisten estas ayudas?
Ayudas para energías renovables
Las últimas subastas de energía renovable en España han puesto de manifiesto los efectos positivos de la competencia. Esto indica que las empresas están dispuestas a invertir en nuevas instalaciones basadas en energías renovables para disminuir los niveles de emisiones y así luchar contra el cambio climático.
El régimen español, que cuenta hoy con unos 40.000 beneficiarios, data de 2014 y concede una prima a las centrales o productores que generan electricidad a partir de diferentes fuentes renovables o cogeneración.
Subastas competitivas y ayudas
Desde el 2016 se han concedido ayudas para participar en subastas competitivas y los adjudicados de las mismas pueden recibir compensaciones solo si el precio de la energía es inferior al de los mercados actuales.
El objetivo de estas ayudas es poder compensar por los costes que no logren cubrir con las ventas y permitirles obtener un margen razonable de beneficio como recompensa por la inversión.
Tras examinar este esquema, Bruselas ha determinado que cumple las normas de ayudas estatales de la UE, que permiten a los Estados miembros apoyar la producción de electricidad a partir de renovables y cogeneración de calor y electricidad siempre que la utilización de fondos públicos “sea limitada y no exista sobrecomenpensación”.
Con estas ayudas se espera aumentar el porcentaje de electricidad que se genera a partir de fuentes de energía renovables y cumplir objetivos ambientales.