Siemens está desarrollando una tecnología de almacenamiento económica . Está investigando en ella al norte de Alemania y se convertirá en un estándar en la eficiencia energética. Después de haber sido convertida en calor esa energía eólica, el sobrante es almacenado y protegido con una cubierta que lo aisla. Cuando hay necesidad de electricidad extra, una turbina de vapor convierte la energía de calor en electricidad.
El simple principio de este almacenamiento promete una configuración extremadamente baja en el coste. El proyecto ha recibido ya fondos por el Ministro del Gobierno Federal. Una tecnología que está siendo desarrollada en Hamburgo y que en ella se suman los esfuerzos de Siemens, Hamburg Energie y TUHH.
La compañía está investigando como hacer la carga y descarga del almacenamiento particularmente eficiente. La optimización de la escullera y de la forma del aislante que lo rodea es crucial para maximizar los resultados. El almacenamiento está siendo probado a temperaturas que sobrepasan los 600 grados centígrado. Al igual que una pistola de aire caliente, un ventilador usa una fuente de aire para calentar las piedras a la temperatura deseada. Cuando se descarga, esas piedras a alta temperatura se encargan de calentar la corriente de aire, la que será capaz de crear la presión necesaria a través de una turbina de vapor.
La capacidad de almacenamiento será de 36 megavatios por hora de energía en un contenedor con cerca de 2.000 metros cúbicos de piedra. A través de la caldera, se generará una salida de hasta 1,5 megavatios de electricidad hasta las 24 horas por día. En el futuro se espera que el potencial de efectividad llegue al 50%, ya que de momento cuenta con un 25 por ciento.
La tecnología FES podrá ser utilizada en la mayor parte de las distintas clases de aerogeneradores y será extremadamente económico. El único límite del concepto es el espacio requerido para el contenedor con todas las piedras.
Otro gran avance como el que ofrece GeoOrbital con su rueda delantera, aunque en otro campo.