Mientras China sigue luchando para paliar la polución en ciertas ciudades, tiene otro gran problema y este se esconde en el 80% del agua de los pozos naturales usados por granjas, fábricas y viviendas en las planicies bien pobladas.
Esto consigue que no se pueda usar para beber o bañarse debido a la alta contaminación ocasionada por la industria y la agricultura, según mantiene unos nuevos datos ofrecidos por los medios chinos el lunes pasado. De tal magnitud es que ha ocasionado una nueva y gran alarma acerca de la polución en el país con mayor número de habitantes del planeta.
Después de años en enfocarse en esos cielos grises, los nuevos datos llegan desde 2.103 pozos que se encuentran situados en China y golpea sobre la fibra sensible de los ciudadanos chinos ya tocados por esa polución en el aire. Son muchos los pueblos y villas que dependen de estos pozos para poder realizar sus quehaceres diarios.
Dabo Guan, profesor de la University of East Anglia y que ha estado estudiando la contaminación del agua en China, mantiene: «desde mi punto de vista, esto indica como el agua es el mayor problema para el entorno en China. Las personas en las ciudades ven la polución en el aire todos los días, por lo que se crea gran presión desde el público. Pero en las ciudades, no son capaces de ver lo mala que es la contaminación del agua. No tienen el mismo sentido«.
En el último estudio publicado se encontró que el 32,9 por ciento de los pozos probados en las áreas del norte y centro de China tenían una calidad en el agua grado 4, lo que significa que solamente es utilizable para la industria. Un 47,3 por ciento de los pozos incluso tienen un peor grado, el cinco. Los contaminantes encontrados incluyen a manganeso, fluoruro y triazoles, un conjunto de componentes usados en los fungicidas.
Guan termina con que la contaminación pesada de los suministros cerca de la superficie forzó a que la mayoría de las ciudades cavaran a miles de metros bajo tierra para agua limpia y eso ha estado mermando la capacidad de esos acuíferos más profundos.