En nuestra vida diaria utilizamos la energía y muchas veces no tomamos conciencia de que estamos haciendo un uso incorrecto de la misma o la derrochamos.
Algunos consejos simples para ahorrar energía son:
- Desenchufar todos los aparatos eléctricos cuando no los utilizamos como computadoras, televisores, equipos de música, etc ya que aunque esten en stand by siguen consumiendo energía.
- Utilizar productos solares ya que en el mercado hay una gran variedad como celulares solares, bolsos, cargadores de baterías, linternas, entre otros.
- Remplazar las lamparas comunes por tecnología LEDS ya que ahorran considerablemente la electricidad.
- Si el lugar donde vives tiene características climáticas favorables utiliza en tu casa y oficina energía eólica o solar, biogas, leña ya que tienen costos accesibles y se aprovecha una energía renovable y limpia.
- Elegir productos eléctrico que sean más eficientes en cuanto al gasto de electricidad. Es importante averiguar esta información en la etiqueta energética antes de comprar un producto electrónico.
- Apagar las luces cuando no se estén utilizando ya que es un derroche importante.
- Es importante tener un buen aislamiento en las casas para evitar las pérdidas de calor que son las responsables del 25 % al 30 % de gasto en calefacción en invierno y que también generan la necesidad de aires acondicionados en verano.
Modificando ciertos hábitos e incorporando a nuestra vida tecnología
más eficiente y que ahorra energía estaremos haciendo un aporte importante en el ahorro energético global.
Tener una actitud pro activa como consumidores y ciudadanos nos permitirá reducir considerablemente nuestra factura de luz y además colaborar en mejorar el medio ambiente.
La electricidad es un recurso muy necesario para nuestro estilo de vida pero hay que usarla racionalmente y utilizar nuevas fuentes de energías más limpias.
Por eso colaborar y apoyar iniciativas en favor de las energías renovables sera un gran aporte que cada uno de nosotros podemos dar.